Evitando el compromiso (Yaoi) 18+

Puedes hablar??

Perdón por la demora, ando terminando todos mis trabajos de fanfics, ya se que no debo hacer muchos al mismo tiempo porque sino pasa que se me va la inspiración, pero son necia y lo sigo haciendo.

Bueno, espero que disfruten en leerlo como yo al escribirlo.

Capítulo 9.

Había pasado ya 3 meses desde el incidente en la escuela mi dragón ya empezaba a poder estar lejos de los padres, por lo cual se la pasaba jugando en el patio de la escuela con unas bolas de pelo que le había hecho mi abuelo, para que así no tuviéramos que meterlo a la Royal One todo el tiempo, mi convivencia con Kalego pronto terminaría y a Balam solo lo veía en clase, desde el incidente con Rhaegar no habíamos podido hablar a solas, pero quería disculparme con él por el tremendo golpe que le había metido mi pequeño bebé.

- Iruma – chi – vamos a jugar – Clara me vio con cara de tristeza, desde que Rhaegar había nacido ya no jugaba tanto tiempo con ella y al igual que Azz se sentían abandonados, así que ese día aprovechando que no teníamos muchas cosas que hacer fuimos al patio a platicar, jugar, comer bocadillos, ponernos al día con todo lo que había pasado en los últimos meses, me sentí bastante bien con ese pequeño rato de tranquilidad, hacía mucho que no me portaba como un estudiante normal, pasaba demasiado tiempo jugando a la casita con mi dragón.

- Waaa estar con ustedes me devolvió a la vida, ya los extrañaba chicos – sin pensarlo mucho los abracé a ambos, cayendo al pasto en el proceso, mis amigos se veían muy felices de la incómoda posición, pero poco duró el abrazó, ya que escuche la voz que me hablaba a la mente directamente y me gritaba "hay un extraño cerca, tengo miedo" me levanté como resorte y entonces seguí mi corazón como la vez anterior y encontré a mi dragón siendo observado por dos individuos desconocidos, estaban vestidos como profesores, pero no los reconocía de ninguna de las materias, "son malos, son malos, son malos, son malos" esos pensamientos no dejaban de invadirme, así que me acerque a mi dragón y vi con cierta desconfianza a los dos individuos – lo siento, ¿los asustó? – Rhaegar empezó a generar chispas con sus plumas, pero lo acaricié por detrás de la cabeza, para que se calmara, no quería armar un escándalo.

- Vaya, no sabía que los alumnos de hoy en día podían traer dragones a la escuela – dijo el hombre de cabello negro, tenía una sonrisa amable, pero las palabras "son peligrosos" no dejaba de asaltar en mi cabeza.

- Jejeje una cosa llevó a la otra – el hombre se iba a acercar a mi bebé, pero rápidamente un rayo lo detuvo, me sorprendí bastante al ver como lo esquivaba, hasta el momento Rhaegar no había fallado ninguno de sus tiros e incluso había podido alcanzar a Opera – lo siento, no le gustan los desconocidos – me disculpe de manera amable, pero aun sonriendo con desconfianza.

- Iruma – sama – Azz y Clara me alcanzaron y vieron a los dos nuevos intrusos, Azz los vio con desdén, ya que al igual que mi dragón desconfiaba de inmediato de cualquier desconocido que quería acercarse a mí y Clara se subió sobre el dragón, ella era un espectador de lo que iba a ocurrir – ¿se encuentra bien? – asentí preocupado, los ánimos se calentaban y el carácter volátil de mi amigo no iba a hacer de ayuda en esos momentos.

- Vaya, como siempre causando conmoción – Kalego llegó casi de la nada, no es que me molestara, pero estábamos en un lugar algo oculto, ¿cómo sabía dónde estábamos? – es bueno ver que ya conocen a sus nuevos maestros – nos llevó hacia la Royal One, pero Rhaegar seguía sin quererse cerca a los nuevos me empujaba con la cabeza y me alejaba de ellos. Había notado que cuando alguien tenía malas intenciones mi dragón lo sabía, pero este era un nuevo nivel de desconfianza.