Evitando el compromiso (Yaoi) 18+

Después de todo soy tu familiar.

Buenaaaas!!!

Muchas gracias por el apoyo y por seguir votando por mi historia, gracias por la paciencia, ya que esto se me ha estado complicando, pero procuro terminar todos mis trabajos.

Espero de corazón que les guste el nuevo capítulo, así que como ya es costumbre en mí, espero que disfruten en leerlo como yo al escribirlo.

Capítulo 21.

Mi anillo volvió a brillar muy cerca y ahí encontré el diario que también estaba buscando, volteé a todos lados y no había nadie más cerca, así que no estaba en peligro, me senté junto a Rhaegar y empecé a hojear dicho diario, las páginas estaban vacías, pero tenía marcas de que había sido usado, mi anillo brilló de nuevo al tocar la hoja con el mismo, el brillo casi me deja ciego, pero al voltear y ver el libro ya había letras en el mismo, ese diario hablaba de Delkira en la escuela, como se había divertido estudiando ahí, la soledad que había sentido por ser más fuerte que los demás, el peso de ser el siguiente Rey Demonio, básicamente era la vida de Delkira en esas hojas.

En las últimas páginas entendí por qué había desaparecido y el por qué solo yo podría encontrarlo, volteé a ver la capa con la cual había tapado a mi bebé y con la magia que envolvía la capa guarde todos los objetos que había encontrado, ahora debía de llegar a casa sin que ese tipo me encontrara, él tenía muchas cosas para poder ganar y convertirse en rey demonio, pero él no iba a aplastar mi ambición, amaba al inframundo y no se lo iba a ceder tan fácilmente, no después de saber que Delkira dio su vida para evitarlo.

Rhaegar despertó después de estar dormido un día entero, Kalego me había preguntado miles de veces donde estaba, pero honestamente no sabía, así que le pedí que me esperara en la mansión y se asegurara de que nadie interviniera mi llegada, tenía que enseñarle algo muy importante y valioso, así que llegaría en un destello de luz en cuanto mi bebé pudiera volar de nuevo.

Opera estaba más que molesto y estaba listo para matar a Kalego cuando se enteró que me había sacado de casa, puesto en peligro y me encontraba perdido en alguna parte del inframundo, sospeche que me daría un buen sermón por lo que había hecho, pero era necesario que encontrara todo lo que llevaba conmigo.

A medio día mi dragón se recuperó por completó y alzó el vuelo, listo para irnos, volvió a sacar sus escamas y los rayos nos volvieron a cubrir, el vuelo fue un poco más tardado que la vez anterior, pero llegamos a la casa, de inmediato llegaron 3 desconocidos que buscaban interceptarme y robarme lo que había conseguido, no llegaron muy lejos, Kalego y Opera se deshicieron de ellos casi de inmediato.

Mi abuelo me abrazó y me dijo lo preocupado que estaba, no dejó que Opera ni Kalego me regañaran y entonces apareció Bachiko junto a Balam, ¿qué hacían ellos ahí?

- Bien Iruma, ¿Qué te orillo a salir de casa? – mi abuelo estaba algo molesto, pero al parecer se estaba conteniendo, así que le enseñé todo lo que había encontrado y se sorprendió bastante - ¿dónde lo encontraste?

- Yo los soñé – a excepción del abuelo todos me vieron sorprendidos – Delkira – sama sabía que había un mal que no podía detener y entonces recordó la profecía sobre el siguiente rey demonio – le enseñé el diario la parte donde él había interpretado dicha profecía – él sabía todo desde el inicio – mi abuelo leyó esa parte y sonrió, al parecer sentía nostalgia por su antiguo amigo.

- No es normal que este enclenque sueñe con el antiguo rey demonio – mi maestra habló y me vio con su típica mirada de furia – ni siquiera lo conoció.