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Nayeon tenía una mochila con su móvil, un sándwich de mermelada de moras y una pequeña botella de jugo de fresa.

Había quedado con Tzuyu para acompañarla a ensayar.

Nayeon jamás había salido sola de casa, pero ahora se veía en la obligación de hacerlo porque su madre había ido a trabajar y Jihyo estaba ocupada en sus exámenes de admisión para la Universidad.

Así que se subió al tren solita y luego caminó hasta dar con la dirección que le había dado Tzuyu.

Se sintió orgullosa cuando llegó. Nada mal para una chica de 16 años; Nayeon sonrió feliz.

Subió en el ascensor y dio con una sala que decía "Dance Practice".

Vio a Tzuyu en cuanto entró al lugar, estaba con otras personas que creía haber visto en fotos de la de cabellos castaños. También estaba Momo, una de las amigas de Jihyo.

—¡Nay, llegaste! Chicos, ésta es Nayeon, de la que les hablé.

Luego de que la saludaran, con algo de distancia para el bien de la menor, Tzuyu volvió a dirigir su mirada a Nayeon.

—Los chicos quieren verte bailar, les mostré el video que grabamos hace unos años en la escuela. Pienso que deberías ser parte de la academia.

Nayeon la pasó muy bien ese día, pero aun recordaba sus piernas temblando cuando la música sonó y todos le miraban.

Llegó a casa en la tarde, con medio sándwich en la mano y sus audífonos puestos. Su madre se alegró de que Nayeon tuviera más amigos ahora.

Jihyo llegó poco después para poder estar un rato con la menor.

—¡Jihyo unnie!.

La madre de Nayeon saludó a Jihyo. —Está chica es toda una mujercita ya, fué sola al centro y volvió a casa sana y salva.

Jihyo sonrió feliz ante la noticia.

Nayeon la abrazó mucho, le dio mucho cariño y finalizó el patrón de actos con un:

—¡Me gusta mucho bailar!.

Jihyo pensó que Nayeon había encontrado al fin lo que la hacía verdaderamente feliz. Cuando su madre fué a la cocina, Jihyo le besó los labios, las mejillas y la frente.

—Felicitaciones, preciosa.

—¡Tus pasitos de pingüino funcionaron, unnie!.

pasitos de pingüino | NahyoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora