capítulo 8

12 1 0
                                    

DAYANNA

8 meses y tres semanas atrás

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

8 meses y tres semanas atrás

Me dirijo a la oficina de Bernardo para despedirme de él, ya que a la misión de mañana él no irá. Pues mi padre quién es el encargado, decidió dejarlo en la base para otros asuntos, entro sin tocar, él levanta su mirada para verme. Su cara de concentración cambia, a una gélida sonrisa para mí. Mi corazón se agita con tan solo verlo.

Entro cerrando la puerta, para acercarme a él, quien ya sea puesto de pie y se acerca para abrazarme, también lo abrazo, pego mi cara a su pecho e inhalo su perfume «me encanta» todo de él me gusta.

-Creí que ya te habías ido a casa -me dice colocando ambas manos en mi cintura.

-No podía irme sin despedirme de ti antes -respondo, levantando mi cara para verlo.

-Yo iría a verte más tarde, ya habíamos planeado algo yo y Elena.

Baja a mi altura para repartir besos por todo mi rostro haciéndome reír.

-Y está vez, ¿Qué sería? ¿Ir por un café, una película?

Mi mejor amiga sabe que salgo su con padre. Pero nadie más lo sabe, ni siquiera mi familia, si se enterarán no sé qué pasaría. Así que cada vez que queremos vernos Elena le dice a mi padre que estaré con ella, cuando en realidad no es así. Aunque a veces lo eh pensado y me estoy cansando de todo esto.

Él me pidió tiempo para encontrar el momento adecuado en que lo diríamos, pero creo que ya ha pasado demasiado. Si dices querer a una persona, se lo demuestras y haces de todo por ella o él, no lo mantienes solo en secreto, bueno, al menos eso pienso yo.

-Te ayudaría con tu equipamiento de mañana, para que no se te olvidara nada, en mi casa claro. Pero ahora que estas aquí, le diré que se cancela.

Se separa de mí, y no lo pienso ni dos veces para decírselo, pues creo que ya es tiempo.

-Bernardo, creo que ya es tiempo de que le digamos a mi padre, a mi familia. Dices quererme, pero todo esto de escondernos me resulta agobiante, y no es que no me guste, al contrario, disfruto al máximo todos esos momentos, pues son únicos porque estoy contigo. Pero creo que ya ha pasado demasiado tiempo y yo yo creo que te amo.

Creo que hable de más, pues no pensaba decir eso último. Y tal vez estoy exagerando, y no sea mucho tiempo, como yo lo hago ver.

Su cuerpo entero se tensa al escucharme, veo como deja su celular en el escritorio, para pasar la palma de su mano por su rostro. Soltando un suspiro.

-Dayanna, ya lo habíamos hablado cariño. Esto no es fácil para mí, ¿Acaso crees que me gusta mantenerte en secreto? No creo que tú padre, se tome de la mejor manera que su mejor amigo, se acuesta con su tesoro más preciado.

DAYANNADonde viven las historias. Descúbrelo ahora