- Bien, entonces... Ve a California y quiero que te hagas pasar por un tonto humano, ganarte la confianza de la sirena Sakura y cuando tengas la primer oportunidad, robarle el tridente y después quiero que la asesines a sangre fría como hizo con los...
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➽───────────────❥ "Fiesta en la playa" ➽───────────────❥
Sasuke la vio irse del resto-bar y aún seguía sintiendo la misma sensación que antes, como si supiera como se sentía Sakura en ese momento. Nunca sintió algo parecido, pero si había escuchado decir que cuando sucedía esto era porque conectabas profundamente con esa persona, siendo tu otra mitad. No podía ser posible, no quería creer que era así, qué Sakura se había convertido en su alma gemela lo pondría en aprietos, no podía considerar sí quiera estar con ella. Sin importar la molestia que sintió en cuánto se enteró que Naruto la había invitado a la fiesta de la playa.
Esa misma molestia, Sakura la sintió teniendo esa sensación extraña en su pecho, que en cambio de Sasuke, ella tenía idea de lo que se trataba. Saber que él era su otra mitad la sorprendió, Más que nada porque pensaba que nunca conocería a esa persona. Su vida era dedicada simplemente y solamente para el tridente, no tenía tanto conocimiento del amor como otras sirenas. Pero aún así estaba triste porque su otra mitad parecía que no le correspondía o que solo jugaba con ella.
Se culpó a ella misma de no verlo venir.
Literalmente habían tenido sexo y desapareció por esos días sin comunicarse, cuándo finalmente se encuentran se entera que va a salir con otra chica. Eso la destruyó bastante, pero se decía a ella misma que no eran nada y no podía decir ni hacer nada. supo qué Sasuke se sintió igual o peor cuando se enteró que Naruto y ella iban a ir a esa misma fiesta en la playa. Pero eso no la hizo sentir mejor porque se combinaron sus sentimientos y fue aún más peor.
Realmente no pudo dormir porque todavía sentía la misma sensación ya que no desapareció, seguía estando presente y en ningún momento se desvaneció. Eso significaba que Sasuke todavía seguía pensando en ella y en lo que pasaría en la fiesta de la playa. Pero también ella porque su cabeza no dejaba de imaginarse la cita que tendría Sasuke con Sharon. Realmente no soportaría verlos juntos toda una noche, apenas y pudo verlos por unos diez minutos en el resto bar interactuando. Pero ya no podía rechazar la invitación de Naruto, después de todo creía que le debía esa salida por todas las veces que le dijo que no, con la diferencia que ahora el rubio estaba invitándola como amigos y que no esperaba otra cosa por parte de ella.
Al día siguiente Sakura se despertó de mal humor porque pudo dormir solamente unas 2 horas, se tuvo que levantar de la cama y se fue a dar una ducha caliente para tratar de relajarse. Así fue como se calmó. Y esa calma la sintió Sasuke desde su casa, dónde estaba tomando un café tranquilamente. Sabía que se trataba de Sakura, todavía le parecía demasiado loco que pueda sentir lo mismo que ella, nunca se imaginaria que conectaría con una sirena y en esta clase de situación. Era todo nuevo para él pero pensando con cabeza fría y sin que se interpongan sus sentimientos, tenía que ignorar aquella sensación para que el plan siga en pie.
