ʀᴇᴅ ʟɪɢʜᴛs ; 𝑅𝑖𝑐ℎ𝑎𝑟𝑑 𝐺𝑟𝑎𝑦𝑠𝑜𝑛 [Eɴ ᴇᴅɪᴄɪᴏ́ɴ]

ʟᴏꜱꜱ ɪɴ ᴛʜᴇ ɴɪɢʜᴛ

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Miraba cada rincón de la enorme mansión, había tenido tantos sueños sobre aquel sitio en particular, todo era tan familiar y al observar a aquellos fantasmas correr en forma de recuerdos tan fríos y llenos de pena la hacían sentir escalofríos.
La mansión Wayne era sin duda una obra de arte que estaba impregnada de sufrimiento.

—Se que has tratado con niños especiales. —musitó Clark mirando de reojo a Bruce quien tomaba de su whisky mientras veía a Leigh curioso.

—Creo que te equivocas de persona Kent. —dejo el vaso en la estantería para mirarlo esta vez a el.

—Dices ¿que los Titans no son tus niños especiales? —ladeó la cabeza fingiendo confusión.

—Eran chicos ordinarios. —corrigió.

—No creo que los actuales titans sean tan ordinarios si hablamos de un tigre verde y una chica tamaraniana. —sonrió esté contagiando a las dos pelirrojas detrás de él. —Por mencionar a algunos, por ejemplo.

—A lo que me refiero, es que, conozco a la persona que trata con chicos especiales. —carraspeó Bruce acercándose a la familia.

—Lo que Clark quiere decir es que necesitamos de tu ayuda Bruce. —musitó esta vez Lois con un rostro preocupado.

—Conozco perfectamente a la persona indicada Lois, es hora de salde mi deuda con ustedes. —le sonrió tranquilizando los nervios de la mayor.

Sin duda Richard Grayson era su hombre en mente; los nuevos titans estaban repletos de jóvenes con grandes habilidades, si alguien sabía como lidiar con superpoderes sin duda sería el.

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