↳Capitulo 5: Las joyas de la reina

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Los pecados capitales día a día todos nosotros los cometemos, ya sea gula, avaricia, envidia o inclusive la famosa irá de seguro la conoces ¿Verdad? Aquella enemiga del ser humano.

La chispa que prende el odio hacia una persona, el odio es el lobo que nosotros tenemos encerrado en la oscuridad de nuestro ser.


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— Las joyas de la reina —

Tamayo

—Suéltame, estás muy equivocado si crees que me voy a dejar manosear, yo no soy una maldita gata en celo .

— ¿Y quien ha dicho que eres una gata? — dijo pausando. — Solamente es un deber que tienes que hacer como esposa, además si fueras un sumida serías la mía, no de nadien más ¿Entendido?

Bajé mi mirada, ¿¿acaso este hombre creé que voy a hacer la esclava sexual de un hombre?? No lo hice con mi esposo ahora con un maldito pervertido.

Sentí que algo frío estaba recorriendo mi cuerpo alce mi vistas, su grandes manos estaban recorriendo todo mi cuerpo, me fijé que al lado de su dedo índice había un anillo, estaba claro que no estaba bromeando conmigo.

— Ni creas que puedes escapar de aquí, hay guardias vigilando alrededor de la casa, además de que esté lugar está alejado de la ciudad, así que espero y ni se te pase por la cabeza salir.

— ¿Cómo sabes eso?

— Eres una madre, las madres saben predecir si un lugar es seguro para sus hijos o no — dijo levantándose de la cama.

Se paró en la puerta giro a verme quería decirle algo, pero no pude ya el se había ido, mire a mi alrededor la habitación era igual de grande y lujosa que la de Muzuko ¿en que me estas metida Tamayo? Esa pregunta sonó en mi cabeza.

En la punta de la cama estaban unas grandes cajas decoradas con un gran lazo transparente rosado, me acerque a ver qué tenían en su interior, por dios que estoy haciendo creerá que soy una facilona.

Mis pensamientos fueron interrumpidos cuando escuché la puerta de la habitación abrirse, gire a ver quién era, pude ver la silueta de mi pequeño hijo entrar.

Los ojos Bermellón que el poseía eran tan hermosos, aunque jamás en la familia de su padre los haya visto, Muzuko era precioso, no lo digo yo por ser su madre, muchas personas en la calle se lo decían.

El camino da dirección mía parado enfrente mío, sus pequeños ojitos estaban hinchados, le dispuse una sonrisa no quería que el viera que esto también me está afectando.

﹋﹋ꜥꜤ ﹆ ❝𝐾𝑂𝑁𝐼𝐶𝐻𝐼𝑊𝐴, 𝑆𝐴𝑌𝑂𝑁𝐴𝑅𝐴 𝐷𝐴𝐷𝐷𝑌❞   𝑃𝐴𝑈𝑆𝐴𝐷𝑂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora