SIN CORREGÍR**************
ALEK
Voy a enloquecer si Bunny vuelve a llorar por alguna estupidez.
Lo juro.
—¡Alek te estoy hablando!— el grito de Bunny me hizo saltar —¿Podemos salir a comprar canela? Se acabo
—el mercadito orgánico que tanto amas está a una puta hora de aquí, podemos ir mañana, son las cinco de la tarde esa cosa que cargas pesa más que tú y conociéndote Bunny, a los cinco minutos de llegar vas a agobiarte y te querrás ir para mandar a Anker a comprar la canela— dije sin verla mientras preparaba su sandwich
Silencio... Mierda eso no era bueno
Voltee hacia ella y Vi sus ojos cristalizados, suspire y le entregué su Sandwich, ella empezó a comerlo en silencio mientras su cuerpo daba pequeños espasmos por el llanto, la abrace por atrás y acaricie su panza, no sé si era que lea es muy pequeña, pero para solo tener cuatro meses traía una panza de ocho, y su carácter había empeorado con forme avanzaba el embarazo.
Estaba compareciendo a mis padres.
—iremos mañana temprano al mercado ¿Si?— bese su cabeza —traeremos canela, azúcar morena de la que te gusta, unos platanitos también, todo lo que quieras.
—¿Y cacao para galletas?— me miró haciendo un puchero y rei levemente mientras asentía.
...
Llevábamos ya veinte minutos en la camioneta, y como cosa rara Bunny de había dormido en el asiento del copiloto me levanto a las malditas siete y media de la mañana para ir a su maldito mercado orgánico, era la misma mierda del supermercado, solo que tenía la parada "orgánico" en la envoltura. Maldigo el día que Anker llevo a Bunny a ese lugar, y todo porque allí trabaja la chica que le gusta no podría ser más patético.
Para todo Bunny pedía ir a ese lugar, todo, mandaba a los guardias encargados de la compra a venir aquí, las de limpieza si decían que era bueno pero para mí todo sabía igual.
Llegamos y estacione la camioneta en el estacionamiento donde había más sombra, baje y le di la vuelta al carro, abrí la puerta del copiloto para mover a Bunny con delicadeza mientras daba besos en su cara.
—dejame dormir— se quejo y rode los ojos
—tu querías venir al mercado, vamos, si nos apuramos te compraré todas las bolsas de platanito que quieras— dije y eso parecío activarla de inmediato, me extendió los brazos y la baje de la camioneta arreglando su vestido
Era como ir a la jugueteria con una niña pequeña, Lea jalaba de mi brazo y me arrastraba a cada cosa que le gustaba, compramos coco rayado, harina de maíz, las dichosas varillas de canela y una bolsa de canela en polvo, azúcar morena, ajo, el cacao para las galletas y chocolate amargo natural.
—lo siento señorita, pero ya no tenemos frituras de plátano— dijo la chica de la tienda
Lea volteo a verme con los ojos aguados, mire de forma asesina a la chica quien solo se encogió en su lugar, atraje a Bunny hacía mi abrazándola mientras ella soltaba leves sollozos, maldita sea ahora no abría ser en el mundo que pudiera calmarla.
—ya no llores, ¿quieres un algodón de azúcar?— tome uno del kiosco mostrandoselo pero solo nego con la cabeza baja — ¿Una chupeta?— frunció el ceño mirándome, bien no lo estaba arreglando.
ESTÁS LEYENDO
solo para mí
Teen FictionSaga Skósyrev [2] Lea Angelis toda si vida fue la chica rara, la suicida, tímida, anoréxica entre otros apodos horribles. Criada de la mejor manera pero con una vida de mierda Hasta que por el nuevo esposo de su madre en su último año cambia de esc...