Inocentemente peligrosa [Spiderman]

24.

Suspiré pesadamente, siento que llevo horas encerrado en esta habitación. Dejo caer mi cuerpo en la silla y miro el techo, estoy perdiendo tiempo valioso por las tonterías de Sam; después de que llegamos al complejo, me encerró en la sala de juntas mientras que él y James salían a hablar con no sé quién sobre el destino del mercenario.

Estoy perdiendo la cabeza, Rosa puede que este en graves problemas y no estoy haciendo nada para ayudarla, aunque, tal vez si hubiera llegado antes nada de esto habría pasado.

—¡Maldita sea!— exclamé furioso golpeando fuertemente la mesa delante de mi.

—Oye muchacho tranquilo, vas a romperla y tendrás que pagarla— escuché a James quien iba entrando a la sala.

Bufé—. ¿Quisieras decirme que diablos estoy haciendo aquí? Tengo cosas que hacer.

James me miró—. Estás aquí porque nos mentiste, le dijiste a Sam que no hablabas con Deadpool sabiendo que él ha estado buscándolo todo esté tiempo, eso lo hizo molestarse mucho— comenzó a hablar mientras se sentaba frente a mi—. Por suerte para ti, yo no soy Sam, así que dime, ¿Que es lo que sabes de la chica?— Lo mire un poco confundido, ¿Será una trampa ideada por Sam para que yo hable? Creo que vio mi rostro de desconfianza ya que soltó una pequeña risa—. No es lo que piensas chico, Sam no me envió a sacarte información.

Asentí lentamente, ¿Estaba leyendo mi mente? Rápidamente aleje esos absurdos pensamientos para poder concentrarme en lo importante—. Ok am... A Rosa la están persiguiendo unos matones, no sé bien que quieren de ella, pero temo que le hagan algo.

—¿Esos tipos son capaces de matarla?

Asentí—. Lo peor es que ella es como su padre, no puede morir, por lo que eso será una enorme tortura para ella.

—Ok, haremos esto— hizo una pausa—. Tu amigo el loco está en el ala oeste, lo tienen en una jaula que, con tu traje supongo será fácil abrir. Para no ser vistos tendrán que usar el ducto que está cerca de su celda, ahí si siguen hasta el final, llegarán al estacionamiento, cerca de donde salgan, los estará esperando una moto negra con azul.

Estaba bastante asombrado—. ¿Estás ayudándome? ¿Por qué?

—Porque digamos que te creo. Rosa es una gran persona, no merece lo que sea que le hagan— ¿Cómo diablos conocía a Rosa?—. Te veo en el muelle, mientras yo buscaré donde tienen a la chica e iré por las armas del mercenario.

—Muchas gracias James, de verdad.

—No me agradezcas aún, primero hay que salvar a la chica, así que date prisa.

Él se levantó de su lugar y salió de la habitación, espere un par de minutos para que no se viera sospechoso y salí también. Camine intentando disimular mis nervios, estaba ansioso pero no sabía si era por el hecho de que ayudaré a un mercenario a escapar o por Rosa. Una imagen de ella siendo torturada vino a mi cabeza, la cual intente alejar, no debía desconcentrarme o todo será un desastre.

Llegué a dónde James me había indicado que tenían a Deadpool, así que entre como si nada al lugar, todos ahí me conocían, por lo que no tenía ninguna restricción. Varias celdas estaban ahí, pero en su interior no había alguna luz tan clara que pudiera indicarme donde estaba a quien buscaba.

—Pool— hablé bajo para no llamar la atención del guardia que estaba del otro lado de la puerta—. ¿Estás aquí?

—¿Que diablos quieres?— lo escuché un poco más adelante, rápidamente me dirigí a esa celda. Pude distinguirlo, él estaba recostado en la cama.

—Vamos, hay que salir de aquí— hablé rápidamente—. Tenemos que encontrarla.

—Largate de aquí— lo escuché mal, es más, ni siquiera se movió de su lugar—. No quiero ver a nadie.

—Vamos Pool, tenemos que ir por Rosa.

—¡Que te largues dije!— levanto un poco más la voz, sentadose de golpe en la orilla de la cama—. No se que carajo haces aquí o si el idiota con alas de mariposa te mando, pero quiero estar solo— hizo una pausa—. Le falle a Vanessa, le falle a Rosa... Soy un idiota.

Solté un suspiro—. No eres el único amigo, yo debía estar con ella, si no hubiera estado sola, nada de esto estaría pasando.

Él negó repetidas veces—. No no no, ¿Es que no lo entiendes? Le prometí a mi hija que no se la volverían a llevar. No pude protegerla cuando era pequeña y no pude protegerla ahora... Tal vez sea mejor que los X-Men o tus estúpidos amigos de mallas la salven, porque yo no puedo.

—Karen, ¿Puedes abrir la celda por favor?

—A la orden Peter.

Y rápidamente la celda se abrió, ingrese al pequeño lugar y pude verlo, cabizbajo y con ambas manos cubriendo su rostro.

—Tu eres su única familia... Por favor, eres el fabuloso Deadpool, nada es imposible para ti, necesito al mafioso asesino que es temido por todos, ella lo necesita.

Lo escuché suspirar—. Voy a matar a cada hijo de perra que se interponga en mi camino, estes de acuerdo o no— hablo con voz neutra—. Me arrebataron a quien más amaba en el mundo, no tendré piedad.

Estaba en contra de eso, pero no quería seguir perdiendo tiempo—. Esta bien, no me interpondre en eso.

—¿Cuál es el plan?

Le conté todo el plan ideado por James. En menos de quince minutos, ya íbamos en la moto de escape, él iba manejando a toda velocidad, tal vez él será inmortal pero yo no, por lo que le pedí ir un poco más lento, obviamente se burló, pero al menos ya no íbamos a 150 km/hr.

—Ya era hora de que llegaran— hablo James en cuanto entramos a la bodega—. Creí que Sam ya los habría encerrado a ambos.

—¿Y este que?— pregunto Pool mientras lo señalaba y volteaba a verme.

—El fue quien me ayudó a sacarte en primer lugar, ahora nos ayudará a rescatar a Rosa.

Giro a verlo—. ¿Y por qué haría eso? ¿Cómo se que no es una elaborada trampa mortal en donde finjes ser aliado y después nos capturas a todos?

James rodó los ojos—. Mira no tenemos tiempo de estar hablando estupideces, Rosa está en peligro y necesitamos sacarla. Hace un par de minutos halle su ubicación, está en los túneles abandonados del subterráneo— hizo una pausa—. El plan es entrar, desmantelar todo, sacar a la chica y salir.

—No suena tan difícil— hablé encogiendome de hombros.

—Creeme niño, lo será.