Capítulo 8

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A la mañana siguiente Mayte se despertó con una sensación de paz bastante extraña, hace mucho que no se sentía así, era como si supiera que de ahora en adelante todo iba a estar bien, todavía estaba bastante sorprendida por lo bonita que había sido la noche y se sentía agradecida con Manuel por el detalle de haberle dado el anillo, salió de la cama después de hacer unos estiramientos y bajó para encontrarse en la cocina con Nora, esa mañana su nana estaba cantando y parecía muy feliz.

Mayte: Buenos días, nana -Sonrió

Nora: Buenos días, mi corazón -La miró.

Mayte: Por qué tan feliz? -Le preguntó.

Nora: No sé -Dijo sinceramente. Hoy desperté con mucha energía -Sonrió.

Mayte: Extrañamente yo también -Dijo mientras se sentaba a su lado. Espero que tengamos más días así -Sonrió mientras jugaba con el anillo que estaba en su dedo.

Nora: Está precioso, tu prometido tiene muy buen gusto -Sonrió mientras la veía

Mayte: La verdad que sí -Asintió. En cuanto lo ví me pareció perfecto -Sonrió.

Nora: Me cayó muy bien -Recalcó. Y está muy guapo -Sonrió.

Mayte: Parece que quedaste encantada -Se rió.

Nora: Ahora entiendo porque aceptaste casarte con él -Le cerró un ojo.

Mayte: Por qué? -Le preguntó sin entender a lo que se refería.

Nora: Porque aunque no lo ames te parece atractivo y lo es -Sonrió.

Mayte: Nana -La regañó.

Nora: Yo solo digo lo que veo -Alzó las manos. Hay bastante química entre ustedes -Dijo sinceramente.

Cuando Nora terminó de hacer el desayuno y después de servir se sentó al lado de Mayte para desayunar, estuvieron hablando de todo un poco mientras disfrutaban de la deliciosa que había hecho esa mañana y al terminar Mayte se despidió para irse a su clase de yoga.

Por otro lado Manuel había despertado con ganas de ir a visitar a Sofía al cementerio, desde que la habían sepultado no había vuelto a pisar aquel lugar, pero creía que era momento de enfrentarse a eso y tal vez desahogar un poco de lo que llevaba dentro.

Manuel: Buenos días -Saludó a su prima y a su hermana que estaban desayunando.

Isabel: Hola, hermanito -Sonrió.

Hanna: Buen día -Lo saludó.

Manuel: Dónde están todos? -Preguntó.

Hanna: Planeando la boda de mi querido hermanito -Dijo mientras rodaba los ojos.

Isabel: Estamos hartas de que sea de lo único que se hable en esta casa -Bufó.

Manuel: Tranquilas -Sonrió. Ya veremos si a mí regreso Gerardo se va a seguir queriendo casar -Les cerró un ojo.

Isabel: Cómo te fue anoche? -Preguntó con curiosidad.

Manuel: Muy bien -Le contó. La nana de mi prometida y su mejor amiga me cayeron increíble -Sonrió. Fue una cena bastante bonita y le di el anillo -Las miró.

Hanna: Oh por dios! -Dijo sorprendida. No sabes las ganas que tengo de conocer a esa prometida, ha hecho milagros contigo -Sonrió.

Isabel: Me da gusto que te haya ido bien -Sonrió. Pero te quiero golpear por no enseñarme el anillo -Lo miró mal.

Manuel: La verdad es que es bastante bonito, en cuanto lo ví inmediatamente pensé en ella -Sonrió.

Hanna: Vas a ir a trabajar hoy? -Le preguntó.

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