Bloodline - Obey Me! Shall we date?

002

— Ohhh, ¿qué es esto? ¡Es muy linda!

— ¡No, no toques eso! — le habló Leviathan a la menor. — ¡No mi figura de edición limitada de Ruri-chan! ¿Tienes idea de cuánto me costó conseguirla?

Habían pasado alrededor de dos minutos desde que Lucifer dejó a Malka al cuidado de Levi, pero él no tenía idea de cómo lidiar con niños y todo se descontroló con rapidez.

— Es bonita, ¿me la prestas?

— No es un juguete; — le quitó el objeto de las manos a la pequeña con cuidado. — es una figura coleccionable de mucho valor, y su belleza sólo debe ser admirada desde un lugar donde no pueda dañarse. — colocó la figura en su lugar y volvió a dirigirse a la niña. — No es para jugar; es para apreciarla.

— Eso es aburrido... estoy aburrida. — empezó a caminar en busca de algo que pudiera entretenerla.

— Espera, estás en mi habitación; no puedes pasearte por ahí como te plazca.

— Pero estoy aburrida... ¿qué es eso? — su atención se desvió hacia el pez dorado de Levi.

— ¿Eso? Es Henry, mi pez dorado. Antes tenía una serpiente, Henry 1.0... no terminó bien, pero pudo ser peor.

— ¡Es bonito! ¿Por qué se llama Henry? — ese era el momento de Levi para empezar a contarle todo.

— ¡Me alegra que preguntes! Ese es el nombre del protagonista de la mejor obra creada en toda la historia del universo: “Tale of the seven lords” o TSL para simplificar. — le contó con entusiasmo. — Ahora, la historia trata de Henry, el protagonista, y cómo interactúa y ayuda a siete lords, que por cierto son hermanos. Mi favorito es el tercer lord, el Lord de las sombras; aunque la mayoría de las personas prefieren al primero. Ahora, la historia comienza cuando...

Y fue así como Levi se la pasó 30 minutos enteros hablándole a Malka sobre toda la trama de TSL, sus opiniones al respecto, todas las cosas que adquirió relacionadas a la obra, entre mucho más. Fue tanto lo que le habló sobre eso, que a la menor se le contagió su fanatismo; ahora ella también estaba interesada en eso.

— ¿Puedo verla, por favor? ¡Quiero verla! — le pidió.

— Dices... ¡¿una maratón de TSL?! ¡Bueno, nunca la ves demasiadas veces, así que por supuesto! — él aceptó sin pensarlo dos veces la propuesta de la pequeña, aún cuando sabía lo mucho que iban a tardar en eso.

— ¡Síííí! — la menor celebró.

Por lo menos ya no iba a estar aburrida. Levi se encargó de explicarle cada parte de la trama mientras la veían, y de paso ella le decía lo que pensaba al respecto, observando con cuidado cada detalle. A pesar de haber empezado un poco mal, los dos pudieron llevarse bien, y Levi también debía hacerse responsable por la posible obsesión por el anime que quizás le estaba pasando a la niña.

Ninguno tenía idea de cuánto tiempo pasó mientras veían aquello, pero tampoco podían apagar todo y dejarlo así. Malka ya estaba demasiado interesada en la trama como para dejarlo para otro día; ella necesitaba saber qué iba a pasar después, así que se terminó desvelando... o bueno, algo así.

—...Estoy muy cansada... — la niña bostezó. — pero también necesito saber qué pasa después...

— Pero espera, ¡no te quedes dormida! Esta es la mejor parte. — Leviathan estaba muy entretenido como para darse cuenta de que ella en verdad necesitaba un descanso.

— Quiero... dormir...

— ¿Qué estás haciendo? — la voz de la madre de Malka en la puerta de la habitación los sorprendió.

— Mami... — la menor la llamó.

— ¿Qué haces despierta a esta hora, Malka? Hace mucho que pasó tu hora de dormir.

— Estaba viendo... — bostezó de nuevo. — TSL...

— ¿TSL? — tardó un poco en procesar sus palabras. — Levi, ¿mantuviste a Malka despierta para que viera una maratón de anime?

— ¡No es tan malo como piensas! Yo sólo quería mostrarle un poco...

— ¿Un poco? — repitió con sarcasmo. — Tú mejor que nadie sabes que se requiere una noche entera para ver todo, y Malka es una niña; necesita dormir temprano.

— Lo siento... — ambos se disculparon a la vez.

— Ven, linda. — entró para tomar a su hija en brazos. — Te llevaré a dormir; Lucifer dijo que puedo usar la habitación que tenía cuando me quedé aquí. Tuvimos una de esas largas conversaciones donde él sólo me regaña; en definitiva no extrañaba eso de él.

— Fue divertido...

— Me alegra que te lleves bien con los chicos, pero no te quedes despierta hasta tan tarde. — ella besó la frente de la menor con suavidad. — Vamos, hay que llevarte a la cama; Satan se ofreció a cuidarte mañana. — le habló mientras salían de la habitación. — Y cuando digo que se ofreció, me refiero a que Lucifer le dijo que lo hiciera y no tuvo más opción.

— ¿Es buena persona? — le preguntó mientras era llevada por un pasillo.

— Todos son buenas personas en el fondo; sólo que a veces, algunos de ellos pueden parecer algo... agresivos. Nada de que te tengas que preocupar; Satan en realidad es muy calmado... la mayor parte del tiempo, si no haces nada que lo enoje, lo cual son... muchas cosas. Bueno, él es el avatar de la ira, pero te prometo que no es malo; él no te hará daño si sabe que podrías ser su hija.

— ¿Y crees que me lleve bien con él?

— Creo que tienes un poco de todos los chicos, así que créeme, encontrarás algo que tengas en común con él.

— ¿Cómo qué?

— Como... los gatos, tú amas los gatos y Satan también los adora; pueden hablar de eso. — para cuando se dio cuenta, su hija ya se había quedado dormida en sus brazos. Observó con cariño a la menor descansar, entró a la habitación donde iban a quedarse y la acomodó en la cama, donde se aseguró de que ella estuviera cómoda antes de volver a dejar un beso en su frente. — Espero que todo salga bien; algún día tendré que saber cuál de todos es tu papá, y cuando eso pase... no estoy segura, pero te aseguro que yo te cuidaré pase lo que pase. — se acomodó junto a su hija con cuidado de no despertarla y la abrazó. — Mami te cuida, buenas noches.

🌺 Publiqué tres capítulos en dos minutos, sigo sin saber qué decir.

Besitos en las manos, cuídense y tomen mucha agua.