7. Charla Nocturna

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Tras un día cargado de mucha tensión, Nishikata pensaba que una buena noche descanso lo ayudaría a relajarse. Lo que no esperaba era que su habitación tuviese que ser compartida con cierta amiga suya.

Nishikata: ¿Enserio no habían más futones?

Takagi: Ni uno solo, yo también me sorprendí.

Nishikata: Mis abuelos prácticamente son medio millonarios, como rayos no tienen futones extra.

Él chico se condenaba a si mismo por confiar en el estatus de su familia para esta situación.

Nishikata: ¿Esto no será alguna clase de broma de la abuela o de mis padres? Estoy seguro de que debería haber alguno por ahí.

Takagi: Esta bien, a mi no me molesta. Después de todo es uno muy grande.

Nishikata: Sí, eso es porque es el futón matrimonial. Se supone que este era para mis padres. -rojo-

Takagi: No podemos hacer nada, sería de muy mala educación despertarlos para pedirles que se cambien de futón.

Nishikata: ¿Realmente si que te importan las apariencias no?

Takagi: Sí es tu familia por supuesto que buscaré que me aprueben.

Nishikata: Eh...ya veo.

Takagi: Entonces, ¿vas a entrar? Te dije que quería que hablemos. -pícara-

Nishikata: Bueno...ya estamos hablando. Además que no hace falta ya que dormiré en el piso.

Takagi: Pero me sentiré mal si pasas mala noche por mi culpa.

Nishikata: Prefiero eso a tener que compartir futón, aún siendo pareja no deja de ser raro.

Takagi: ¿Solo estás avergonzado por tener que dormir conmigo, verdad?

Nishikata: Hsk...Ni para que mentirte, si siempre me lees la mente. -resignado-

Takagi: Vamos, ni que te fuera a morder o algo jajaja.

Nishikata: No es eso, simplemente no podemos y ya. -nervioso-

Takagi: Hmmm, ya veo. Supongo que no me dejas opción.

Nishikata: ¿A qué te refieres?

Takagi: Si no entras pronto, les contaré a los demás en la escuela que te orinabas en la cama hasta los 5.

Nishikata: ¡Eso es mentira, lo deje a los 4!

Takagi: Vaya, así que fue a los 4. Gracias por la información.

El chico se daría cuenta que había sido engañado una vez más.

Nishikata: Quiero que sepas que eso es un golpe bajo.

Takagi: Lo siento, pero es importante.

Nishikata finalmente se rendiría y entraría al futón con ella.

Nishikata: ¿Y bien, de que querías hablar?

Takagi: De tu abuelo, si sabía que era alguien serio pero no esperaba que fuese tan estticto.

Nishikata: Ha sido así desde que tengo memoria, aún recuerdo cuando veía a mi padre practicar la elaboración de porcelana junto a él y mi tío.

Takagi: Ya veo, así que tú te animaste al verlos trabajar juntos.

Nishikata: Algo así, de pequeño pude hacer unos cuantos platos y uno que otra taza.
Pero nunca fueron lo suficientemente perfectos para el abuelo.

Takagi: ¿Era alguien exigente incluso cuando solo eras un niño?

Una mentira de amor verdadero - KJNTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora