Al día siguiente de mi cagada estelar al decirle a Leo inconscientemente "Te quiero" me desperté y vi que Selene no estaba en su cama, así que bajé a ver dónde se encontraba. Cuando llegué a la cocina allí estaba ella haciéndose el desayuno.
-Holiiiiiis.-dije saltando
-Hola....-me respondió sin voltearse
Tal y como saludó me pareció un poco raro, ya que siempre que le saluda diciendo "Holooooo".
-¿Te pasa algo Selene?- pregunté extrañada
-No.... Tranquila no pasa nada, pero como estamos de vacaciones hoy prefiero ir a dar una vuelta..... Sola. Si quieres puedes quedar con Leo y Nico, no te lo prohíbo....-me contestó
-Vale y, no voy a quedar, estaré en casa, no saldré.- dije
-De acuerdo.-me dijo
Para mientras hablábamos, ella ya había acabado de desayunar y se disponía a irse, ya que estaba cambiada.
-Pues me voy... Estoooo.... Luego vuelvo...- tartamudeó
Se puso un chaleco marrón y salió de casa, quedándome yo sola.*Narra Selene*
Hoy no era un día muy bonito, por llamarlo así, estaba triste y no había ganas de salir con amigos y divertirse, solo quería dar vueltas y vueltas por la ciudad hasta que me cansase. Estuve caminando entre calles hasta llegar al punto en que no sabía dónde estaba, pero no me importaba, seguí caminando cuando me disponía a girar una esquina y de repente ¡ZAS! me choqué con alguien.
-¡Auch! ¡Oye! ¡Mira por donde vas!- grité
-¡Lo siento! ¡No quería chocar contra ti! ¡Perdona no era mi intención!- dijo él
En ese momento levanté la mirada para ver quien era, era un chico sentado en el suelo por la caída, por lo visto también había caído al suelo como yo, tenía unos ojos azules, pelo corto, ondulado y rubio acastañado tenía pecas en las mejillas y en la nariz y...... Me sonreía. Esa sonrisa me dejó en shock esos ojos azules brillaban y su sonrisa me cegaba, me quedé en blanco, no sabía qué decir.
-Emmmmm..... Esto...... N-no pasa nada-dije levantándome. Él seguía en el suelo, pero no se molestaba en levantarse, parecía estar bien ahí y lo que más me inquietaba es que no paraba de sonreír y de mirarme, eso no me gustaba.
-¿Acaso no te vas a levantar?-dije con un poco más de seguridad
-Oh...... Sí..... Es cierto...- se levantó den suelo y se quitó el polvo.
-Me voy.... Sigue con tu vida chico.- se que soné un poco borde pero me inquietaba la forma en la que me miraba.
-Me llamo Carlos, Carlos Jauregui-dijo
-Yo Selene, Selene González-respondí
-Me gusta tu nombre- ladeó la cabeza y ponía cara de alelado, a lo que yo, obviamente, no pude evitar ponerme roja.
-G-gracias..... Bueno, adiós Jauregui-me despedí
-Espera.-me cogió del brazo-¿Puedo volver a verte?-me pregunto sonrojado y nervioso
-No soy yo quien lo decide.-sonreí
Me solté y seguí mi camino. Ese chico..... ¡¿Qué acababa de pasar?! No había dejado de sonreirme ¿Por qué? Buff no sabía me pasaba, solo nos habíamos cruzado las miradas y ya me había puesto nerviosa.... Me había hecho sonrojar.... Yo le había hecho sonrojar a él..... Esto no va bien, no quería sentir eso.... "El amor a primera vista no existe" me repetía una y otra vez.... Se supone que no debo estar feliz un día como este..... Era el aniversario de la muerte de mi madre hace 5 años.... Y ahora viene ese chico y me sonríe.... ¡No! ¡No lo voy a permitir, el amor a primera vista no existe! Me grité a mi misma. Después de mis estúpidos debates internos, miré el reloj, eran la 13:30 así que decidí ir a comer a casa.
-Ya he vuelto.- dije
-Weeeee.-gritó Nieves al ver que ya había vuelto
-Vaya, que contenta estás....-respondí
-¡Sí! Me aburría sola en casa, oye ¿por qué estás roja?-me preguntó extrañada
Al escuchar eso me llevé la manos a las mejillas ¿¡cómo podía seguir roja si eso había pasado hacía un cuarto de hora!?
-N-no.... Por nada...-murmuré
Me fui corriendo a la cocina a por la comida sin decir nada, hoy no quería tener más contactos con ninguna persona... Ya tenía suficiente con lo que había pasado con ese tal Carlos Jauregui. Nieves me siguió e hizo lo mismo que yo, ponerse la comida y comer. Cuando acabé esperé a que Nieves acabase para no dejarla tan sola. Cuando Nieves acabó me levanté y me fui a dormir. Soñé con ese chico..... Soñé con su sonrisa ¡¿Por qué me pasa esto a mí!? ¡¿Qué le he hecho al mundo para que sueñe con la sonrisa de un chico al que no conozco?! Me desperté a la media hora. Nieves también estaba durmiendo pero en su habitación. Me levanté y le escribí una nota: Me voy a dar otra vuelta, volveré a la hora de cenar. ¡Xao! Besos, Selene.
Una vez acabé se la pegué en la frente a Nieves, y me fui.
Seguí caminando, como antes, si pensaba en algo era en mi madre y en que no era justo que se hubiese marchado..... "Si solo hubiese sido valiente.... Si solo la hubiese protegido" me culpaba de su muerte, yo fui la que no pudo evitar que se la comiese un minotauro (animal mitológico que tiene cuerpo de hombre y cabeza y pezuñas de toro) pero ya daba igual...... Por el camino tenía la cabeza en otro lado y no me di cuenta de que pasé al lado de Nico.
-Hola Selene.-sonrió
-Hola Nico.... ¿Quieres algo?-con él si que era borde, no me parecía bien lo que hizo cuando era mi mejor amigo.
-N-no.... Solo quería saludar-respondió
-Pues ya lo has hecho, ala adiós-me dirigía a seguir caminando cuando, derrepente.... Me abrazó.....
-Sé que es el aniversario de la muerte de tu madre...... Quería decirte que lo siento.... Si necesitas algo dímelo....-me dijo
Ya no podía más, estaba harta de que fuese así conmigo después de lo que pasó.
-Si necesito algo eh....... Sí, sí que necesito algo....-suspiré
-¿El qué?-sonrió
-¡¿EL QUÉ?! ¡¿QUE QUÉ NECESITO!? ¡¿NECESITO UN MALDITO POR QUÉ?! ¡¿POR QUÉ TE ALEJASTE?! ¡¿POR QUÉ ME IGNORASTE!?-Me alteré y me puse muy nerviosa
No me respondió.... Miró al suelo con cara de decepción, lo que me hizo enfadarme más y sin pensarlo dos veces y le di una bofetada en la mejilla y me fui corriendo dejándolo solo. Me fui a casa pasaba de estar mediahora más dando vueltas, no quería cruzarme con nadie más.*Narra Nieves*
Me desperté cuando vi que tenía algo en la frente, era una nota de Selene, decía que se iba a dar más vueltas por la ciudad. Yo ya lo suponía, así que me puse a ver la tele. Estuve como dos horas viéndola cuando escuché la puerta. Pensé que sería Selene y no me equivoqué. Cuando entró, simplemente estaba en frente de la puerta con una sonrisita de oreja a oreja. Ella solo me miró extrañada pero no dijo nada. Hicimos pizza para cenar y luego nos fuimos a dormir, ya que no hablamos no tardamos mucho en dormirnos.