El resto de la tarde, Selene y yo, lo pasamos en casa viendo una película y comiendo palomitas. Cuando acabó la película ya eran las 21:00, así que cenamos y nos fuimos a nuestra habitación. Como mi cama era doble, yo dormía en la de arriba y Selene en la plegable. Nos pusimos el pijama y cada una se acostó en su cama, pero yo no podía dormir.
-Pss, Selene, estás despierta?-pregunté susurrando.
-Sí, no puedo dormir.-contestó.
-Lo mismo digo.-respondí.-Es extraño el comportamiento que han tenido Nuria y Carla hoy.-dije.
-¿De verdad no lo sabes, no te lo ha dicho tu madre?-me preguntó un poco extrañada.
-¿Qué se supone que devo saber?-dije.
-Pues...... Claudia ha muerto......-me dijo con tono tranquilo, pero triste. En ese momento sentí que mi corazón no palpitaba, Claudia, mi mejor amiga había muerto y yo no lo sabía.
-¿Cómo lo sabes?-pregunté asustada, y por mis mejillas cayendo lágrimas.
-Les leí la mente a tus amigas.-contestó.-Y no llores, no me gusta ver llorar a la gente, por muy ángel que sea soy una persona viva, con sentimientos, que sufre dolor físico y mental, como cualquier otro, salvo que tengo alas, o mejor dicho, tenía.-me dijo. Esas palabras me calmaron, como si me hubieran dado una pastilla para el dolor de cabeza y se me hubiese pasado al segundo, y dejé de llorar. Se dió cuenta de que ya no tenía lágrimas en los ojos.-Gracias.-me dijo sonriendo.
-Pero,¿cómo ha muerto?-pregunté un poco más tranquila.
-Ellos creen que ha sido un accidente, pero la han asesinado.-contestó con gesto muy serio.-Pero no sé quién.-añadió. Habían asesinado a mi mejor amiga, no creo que fuese coincidencia, podría haber sido cualquier otra persona, pero no, había sido mi mejor amiga. Después de la conversación, nos quedamos dormidas, pero Selene pasó la noche muy mal, tuvo pesadillas, pero las sufrió en silencio, lo sé por su cara de sueño al día siguiente, suerte que era sábado.