La chica que más odio

Capítulo 41: La realidad es cruel

En una cafetería no muy lejos de la Productora Yazawa, una pelimorada embarazada molestaba casualmente a su acompañante, una mujer de estatura medianamente baja y con cabellera negra.

— Ya deja de fastidiar Nozomi ¿Qué no ves que no estoy de humor? — Se quejaba Nico de las manoseadas proporcionadas por su amiga.

— Ya veo, es una lastima, quería ver tus expresiones pero con eso que me dices supongo es algo bastante grave

— No es grave... es molesto, quiero decir... — Suspira — Una cosa es tener que ver a la víbora esa paseándose por la casa, me voy a mi cuarto o simplemente la ignoro, pero otra cosa es ver a Maki-chan toda idiotizada con la foto de la bebé desde hace casi un mes y que parezca colegiala enamorada ¿Sabes?

— ¡Vaya! ¿Ya nació la niña que ya tiene foto de ella?

— La ecografía Nozomi, la ecografía — Nico recargó su cabeza en ambas manos con algo de frustración, sinceramente no tenía ningún ánimo ese día.

— Solo bromeaba, deberías estar un poco más relajada, dijiste que podrías con la situación ¿No? — preguntó algo preocupada la embarazada.

— No lo sé, me estoy frustrando bastante, antes de que todo esto sucediera creía que todo era felicidad y flores siempre y cuando estuviera con Maki-chan... pero ahora solo veo que las únicas que son felices son ellas con la espera de su hija y yo simplemente me pudro lentamente.

— ¿Ya hablaste con Maki de esto?

— ¿Y qué le voy a decir? "Oye Maki-chan, podrías dejar de ponerle atención a tu hija y atender a tu maravillosa esposa que deseaba tenerte solo para ella antes de que todo se fuera a la mierda" ¿Eso?

— Ahhm... no necesariamente decirle eso, simplemente decirle cómo te sientes con el tema, Nicocchi no eres feliz así

— Ya lo he hecho, cuando estoy con ella soy feliz, llevamos nuestro tiempo, nuestro mundo y me encanta pasar tiempo solo con Maki-chan, claro el poquito que es posible pero cuando se trata de la víbora es difícil, todo se distorsiona, me molesta y terminó culpando a Maki-chan por todo. Aunque Waki-san consiguió a alguien que nos ayudará para atender las necesidades de la boa para que deje de fastidiarme tanto, siempre encuentra la forma de hacerme enojar. Además de que se la pasa cuidando de la mujerzuela esa todo la mayor parte del tiempo, ni el año nuevo pude disfrutar, tuvimos que llevarla a la mansión y estuvo como siempre, toda empalagosa tratando de agradarle a la gente.

— Vaya que sí es un tema bastante fuerte, yo no sabría qué hacer si Elicchi y yo estuviéramos en la misma situación, eres muy valiente y por lo mismo creo que debes de aguantar un poco, estoy segura que todo mejorará con el tiempo

— Sinceramente, no se cuando vaya a ser eso, la hija es de por vida — Nico sonrió irónicamente — ¿Te imaginas? ¿Qué pasaría si le dijera a Maki-chan que quiero formar una familia con ella? Creo que se volvería loca

— Y por lo que dices creo que Nanako estaría exigiendo aún más atención y habría una guerra de embarazadas, Nicocchi deberías embarazarte — Nozomi sonrió con una ligera burla en sus labios

— La que se va a volver loca soy yo con tus ocurrencias, ya no quiero hablar de esto

— Muy bien ¿De qué quieres hablar entonces?

La pelinegra miró por el ventanal de la cafetería tratando de distraerse un poco y tomando de la taza de té entre sus manos — ¿Cómo vas tú y Eli?¿Cuántos meses llevas ya?

— Cuatro meses ya ¿Quién creería que ese fin de semana tendría ese resultado?

— ¿Estas hablando de cuando se quedaron encerradas y teniendo sexo como locas por casi 5 días? eso no es un fin de semana