Capítulo 15: Cosas raras

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Maki despertó exaltada y sudando, se enderezó, sus ojos se movían velozmente en búsqueda de reconocimiento del lugar donde se encontraba, lo lógico para ella era que estaba sobre una cama aunque estaba a oscuras no le fue difícil saber eso, así que buscó con su mano y tientas su celular, logró llegar al borde de la cama de ahí que localizó un buró dónde estaba una lámpara la cual no dudo en prender; cuando su vista se aclaró se quedó viendo la habitación pero su cara estaba llena de confusión "¿Dónde estoy?"

Rápidamente se paró, tenía una sensación extraña en su cuerpo, los latidos de su corazón eran acelerados, estaba acalorada pero a la vez tenía escalofríos; eso mismo le hizo darse cuenta que estaba desnuda "¿Qué sucedió?" en cuanto encontró sus cosas comenzó a vestirse y salió de la habitación.

Al llegar a la entrada del hotel, le llamo la atención la recepcionista que acababa de terminar una conversación telefónica, se acercó a ella.

-Disculpe!- Maki había llegado con tanta energía que la mujer dió un pequeño brinco.

-Ah! Señorita me asustó- la recepcionista presionó su pecho pues sentía que se le salía el corazón del espanto -Dígame, en que le puedo ayudar?- preguntó ya más calmada.

-Vera... sé que puede sonar un poco extraño lo que le voy a preguntar...- Maki se movía con mucha ansiedad y tenía los ojos muy abiertos -En qué momento llegue aquí?

La recepcionista arqueó una ceja con confusión -Ammm usted y otra señorita de cabello castaño llegaron aproximadamente unas 4 horas...- realmente no sabía si esa era la respuesta correcta, así que se quedó callada después de eso.

Maki hacia un movimiento continuo con los dedos sobre el mueble, pensaba detenidamente lo que le había dicho -Esa señorita... hace mucho que se fue?

-Unos 15 minutos aproximadamente que se retiró, dijo que usted se iba a quedar lo que resta del tiempo

Maki observó rápidamente la hora del reloj que estaba en la pared, 04:30 am "Que rayos...?" -Ok gracias, de hecho me retiro en este momento, cuánto debo?- Buscaba entre sus cosas su tarjeta para pagar.

-Señorita su hospedaje lo pagó usted en cuanto llegó.

Maki quedó conmocionada después volteó a otros lados para evitar contacto visual con la mujer enfrente de ella -Cierto, que torpe lo olvide- se daba de topes en la cabeza, realmente esperaba que la recepcionista no se fijara mucho en ese descuido, la pelirroja tuvo que seguir la corriente para no verse obvia -Bueno entonces me retiro, gracias- Maki salió apresurada.

-Señorita su auto!- Escuchó a lo lejos que alguien le gritaba, seguramente alguna empleada del valet parking.

-Regreso por el más tarde!!!- Comenzó a correr, esa sensación de energía excedente se sintió tan bien que no le permitió parar "Espero encontrarla cerca" pensando en Nanako para que le aclarara lo ocurrido, de pronto por falta de aire se detuvo para regular su respiración, no importaba lo confundida que hubiera despertado, por alguna extraña razón estaba feliz, se encontraba entre las calles de la ciudad ya distraída olvidó la razón por la que corría.

Maki siguió caminando por un rato más, nuevamente se detuvo cuando notó que el cielo comenzaba a aclararse "Ya está amaneciendo? Que rápido! Será mejor que vaya a casa"; un poco más tranquila entró a su departamento y no vió rastro alguno de Nico, era demasiado temprano "Probablemente siga dormida", camino hacia su recámara sigilosamente, cerró la puerta y buscó entre sus cosas un reproductor de música, se colocó los auriculares y se acostó en la cama, su cuerpo el exigía descanso, sus ojos estaban cansados pero su mente estaba insomne, así que decidió sacar un libro y comenzar a leer.

La chica que más odioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora