Una Aventura Intergaláctica✨ (Jelly Jamm)

T.2 Capítulo 2: Un Día Como Otro

Después de improvisar la comida, Cristal decidió darse una ducha, había sudado muchísimo de mientras su expedición mañanera. Bello estaba en la sala, viendo la televisión de mientras comía un buen helado de chocolate. Estaba aburrido. La chica se vistió con ropa cómoda y se unió a Bello en la sala. El olor de la comida casera aún flotaba en el aire, creando un ambiente acogedor.

Bello, intrigado por la televisión, no notó la llegada de Cristal hasta que ella se dejó caer en el sofá a su lado.

-¿Qué estás mirando? - Preguntó ella, secándose el pelo con una toalla.

-Solo algo aburrido. -Bello le ofreció un poco de su helado de chocolate-. ¿Quieres?

-Eso no se pregunta. -Cristal aceptó el helado con una sonrisa y le dio un mordisco.

Bello se giró para verla a la cara al recordar que le podía sacar algo de chisme a su hermana.

-Por cierto, ¿qué tal fue tu mañana con Ongo?

Cristal se encogió de hombros, tratando de parecer indiferente.

-Fue bien, simplemente dimos un paseo por el río buscando diferentes tipos de peces. Es agradable pasar tiempo con él.

Bello sonrió con malicia, detectando la oportunidad de obtener información jugosa.

-Oh, ¿solo un paseo por el río? Nada emocionante, ¿eh? -Respondió Bello, levantando una ceja de manera juguetona.

Cristal rodó los ojos, sabiendo que su hermano estaba buscando información.

-Sí, Bello, solo un paseo. No todo tiene que ser una aventura épica, ya sabes.

Bello sonrió de oreja a oreja, disfrutando del propio juego que había creado.

-¿Solo un paseo o un paseo especial? -preguntó Bello, enfatizando la última palabra.

Cristal soltó una risa, sabiendo exactamente a dónde iba la conversación.

-¿Qué insinúas? Solo fue un paseo normal.

Bello levantó las manos en señal de rendición, pero su sonrisa pícara no desapareció.

-Está bien, está bien, no diré más. Solo espero que te divirtieras ahora en tu ""quedada normal"".

Cristal río y le lanzó un cojín.

-Mira quién habla, el que se queda en casa comiendo helado y viendo la tele.

Bello se encogió de hombros, sin avergonzarse en lo más mínimo.

-¡Hay que disfrutar! Además, tengo un helado y una película, ¿quién necesita más?

Optó por un vestuario que reflejara su estilo desenfadado pero con un toque especial. Mientras elegía su ropa, reflexionaba sobre cómo Ongo opinaría de cada prenda.

Al salir, notó que Bello seguía absorto en su película. Le lanzó un rápido adiós que no le dejo ni tiempo a responder al rojizo y se dirigió a "casa" de Ongo. Aunque la palabra "cita" sonaba un poco más formal de lo que era, sabía qué pasar tiempo con el morado siempre era especial. Además, ella quería ver como el chico se mostraría esa tarde.

Cristal llegó al lugar y vio a Ongo, que ya estaba allí, sentado en su característico sofá a cuadros leyendo un libro. La joven sonrió al verlo.

-¡Hola, Ongo! - saludó Cristal con entusiasmo mientras se acercaba.

Ongo, aunque normalmente estaba tranquilo ante todo, ahora parecía estar movido. Reaccionó con un ligero movimiento de manos para saludar a la chica.

La rojiza se sentó a su lado, tratando de ocultar sus propios nervios. Sabía que Ongo siempre mantenía la calma, pero eso solo aumentaba su propia ansiedad en estas situaciones especiales.