HYBRID III

Capítulo 2

Dione.

Ambas entramos a mi casa una vez estacionamos el vehículo en el garaje, entré a la sala y encendí las luces.

—¡Sorpresa! —exclamaron las chicas.

Bella estaba sorprendida.

—¿Pero qué...?

—No me digas que creíste que no tendrías despedida de soltera —dijo Alice burlona.

Rápidamente Alice la tomó por el codo y la llevó hasta el sillón, dónde Ángela y Jessica estaban, Emily, Leah y Sandra salieron de la cocina con bocadillos, mientras que Aleja, Luna y Bree se encontraban terminando de poner música, la cual resonó a un bajo volumen en la casa, Rosalie y Esme terminaron de preparar unos pequeños regalos que le íbamos a dar a Bella.

Sonreí negando con la cabeza mientras me unía a las chicas en el sofá.

Ángela y Jessica estaban completamente encantadas con el anillo de Bella, ambas también se encontraban en diferentes universidades, pero no tan alejadas como nosotras, Ángela seguía junto a Ben, estaba segura de que próximamente ambos también se casarían, mientras que Jessica y Mike... Bueno aún hablaban ya no es lo mismo de antes pero estaba segura de que posiblemente volverían a estar juntos, solo era cuestión de tiempo.

Rosalie se sentó a mi lado y como ya le era costumbre comenzó a acariciar mi cabello, ambas nos habíamos hecho mucho más cercanas.

—Entonces Bella —dijo Luna la cual también ya estaba junto a las demás en el sofá.

—¿Ya sabes lo que te pondrás en la noche? —dijo Aleja.

Bella las miro confundida.

—Lencería Bels —dije obvia —¿Ya tienes la lencería que vas a usar?

Ella se puso completamente roja.

—No había pensado en eso, digo no es la primera vez que lo hacemos entonces no lo vi necesario —murmuro avergonzada.

¿Escucharon eso? Mi Bella ya no era virgen.

—¿Y que si ya lo hicieron? Es su noche de bodas y su luna de miel —dijo Ángela.

—Como sea —dijo Rosalie —Sabíamos que esto pasaría.

Ambas miramos de reojo a Alice.

—Así que te preparamos algo, cielo —dijo Esme trayendo una pequeña maleta en sus brazos, la dejó frente a Bella y todas nos amontonamos para ver su rostro.

—Es lo que creo que es —dijo nerviosa.

—Ábrelo y averígualo —dijo Jessica.

Asintió y nerviosamente abrió la corredera, si antes estaba roja ahora parecía un tomate. Dentro de la maleta había más de veinte conjuntos de lencería y es que era uno por cada día, y teniendo en cuenta que estarían un mes fuera.

—¡Chicas! Esto es... —comenzó, Bree la interrumpió.

—Solo agradécenos —dijo Bree con una gran sonrisa.

—Puedes estar segura de que lo necesitarás —Alice le sonrió divertida.

Bella me miró, su vergüenza no había bajado ni un poco, le guiñé un ojo.

Ella sonrió tímidamente.

—Bueno —sonrió Alice —¡Que comience la fiesta!

—¡Si! —gritamos todas.

La música se elevó de golpe y para mí sorpresa en solo unos segundos mi casa parecía una discoteca, todas bailábamos al ritmo de la música, también cantábamos y saltábamos por toda la sala, nos estábamos divirtiendo sin duda alguna.