☸}-[Capitulo XII]-{☸

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P.O.V Omnisciente

Por otro lado, Hikari estaba sentada en la cama de la que ahora sería su habitación, leyendo un libro y pensando en ese joven de mirada atrayente, simplemente se sintió correcto, no es como si hubiera hecho algo, pero esa simple interacción la dejó aturdida, después de irse volvió al barco, haciéndose cargo del inventario, luego llegó a la que sería su nueva casa, mañana iría a ver su lugar de trabajo, ahora se concentraría en descansar y distraer un poco su mente, dejó el libro en una mesita que tenía al lado y de entre sus cosas sacó un paquete con un trapo viejo y de mal aspecto como envoltorio, lo desenvolvio y vio la portada que generaciones de antepasadas habían visto, ojeó las páginas hasta encontrar lo que buscaba, vio la desgastada página, tenía por título "Kakushi: El reino oculto en la luz de Luna y sus elegidas" lo había leído durante la noche donde madrugó antes de zarpar, ahora quería repasarla en caso de que se saltara alguna pista, tal vez ver las anotaciones de sus antepasadas y de paso ver si hay alguna nueva misión. Las páginas estaban algo desgastadas y la escritura brillaba un poco conforme se iba escribiendo más y más de la nada, el texto era legible, así que empezó a leer.

El Reino de Kakushi alguna vez fue una gran y próspera nación, teniendo avances increíbles en transporte y medicina, era un reino que dependía principalmente del comercio de todas sus artillerías e inventos adelantados a su época, la parte sur estaba rodeada de mar, mientras que la norte tenía bosques que se extendían tanto como el horizonte, veneraban a la Luna como diosa principal y madre de todo y al Sol como el padre absoluto, representante de la luz, una dualidad de deidades justa, donde ninguno era más que el otro, también veneraban a otras deidades, sin embargo el sol y la luna son los dos principales.

El país tenía un hechizo de protección que hacía que sólo los originarios pudieran encontrar el camino a casa y entrar, los extranjeros tenían que tener el consenso de algún residente dentro del país; a diferencia de muchas otras naciones Kakushi tenía una forma peculiar de elegir su gobernante, la tierra del reino, las casas, los palacios, todo básicamente estaba vivo y cuando la gobernante estuviera próximo a la muerte, este libro sagrado sería el encargado de elegir a una joven de entre la población, luego encargándose de su educación para poder ascender al trono junto con la actual gobernante, todo era pacifico, sin embargo una guerra azotó a la región, saqueos, batallas, incendios, todo por tropas enemigas celosas del reino bendecido por la Luna.

Una joven llamada Saisho Akarui era la aprendiz de su majestad en ese entonces, cuando una armada de más soldados de los que podían enfrentar llegaron al palacio, el primer ministro, llamado Uragi traicionó a su reino y los dejó entrar, la codicia había consumido toda su alma, la entonces la reina se vió obligada a hacer un hechizo el cual le quitaría la vida y dejaría al país durmiendo, pero expulsará a los intrusos y todos estarían seguros, antes de completarlo le dió el libro a Saisho quien huyó cumpliendo la última orden de la reina, le encargó que dejara que la guerra termine y luego vuelva, el único problema es que Saisho todavía no sabía cómo regresar al reino debido al hechizo de protección, años después del término de la sangrienta guerra, Saisho buscaba su país natal, dejando así el legado Akarui junto con el libro a su hija, quien se la dio a su hija y así hasta llegar a tí, Hikari Akarui. ¿Serás capaz de superar esta prueba que tus ancestros no pudieron? Solo el destino lo sabe, que la Luna te vendiga y el Sol te proteja en tu aventura

La joven se quedó pensando un poco mientra veía hacia el cielo despejado que se divisaba a través de la ventana, la historia sonaba un poco trágica, Hikari volvió a envolver el libro y lo escondió en un departamento especial debajo de su cama, se cambió a un delicado camisón blanco, se soltó el cabello y se acostó a dormir, no sin antes apagar la vela y abrazar delicadamente a Jeku, quien se encontraba dormida a su lado desde que regresó, cerró los ojos y poco a poco fue cayendo en los brazos de Morfeo.

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Al día siguiente, Hikari empezaba a abrir los ojos, levantándose con pereza y estirándose al ya estar sentada, vió el sol y supuso que todavía era temprano, iría a su oficina a terminar el papeleo que le faltó, si le hubieran dicho que tenía tanto papeleo hubiera renunciado, pero ya es demasiado tarde y a ella no le gusta retrasarse ni rendirse, por lo cual se arreglo en algo formal pero cómodo y se dirigió a la cocina para desayunar antes de empezar con el martirio, tomó una copa de hidromiel después de comer algo de carne y se marchó a trabajar, así pasaron las horas, los días, las semanas y los meses, la compañía se estaba ganando un lugar en Reim, teniendo bastante éxito y creciendo rápidamente, incluso llegando a ser una de las más famosas entre las bocas de los lugareños y extranjeros, su demanda estaba por los cielos y todos estaban trabajando duro para mantener todo funcionando correctamente, claro, todo esto valía la pena, todos eran recompensados con una buena paga, siendo tratados con respeto y como una gran familia donde Hikari era la matriarca, a pesar de que Ryo parecía más la madre y que Hikari llegará a ser algo imprudente e infantil, pero encuanto los negocios se trataba, parecía tener ojo de halcón y garras de tigre, hoy era uno de esos días en los que la protagonista se desvelaba para terminar con el papeleo, maldito papeleo, no la deja en paz, pensaba molesta, revisando entre los cientos de aburridos papeles, se encontró con una carta dirigida a la presidente de 'La Empresa Leviathan' (Nombre de la empresa) la abrió con cuidado, sintiéndose curiosa por su contenido, dentro había un papel con bordes dorados y con algo escrito en tinta negra y una perfecta ortografía.

'Para la presidenta de: La Empresa Leviathan

Por la presente se le invita a la gala anual de Reim para empresarios y comerciantes, usted se ha ganado la fama y el dinero suficiente para poseer una de las empresas más prósperas de Reim en algunos meses, no cabe duda que es digna de estar es esta gala, si le es posible venir, le pedimos por favor que se presente con esta carta, a las 10 p.m dentro de una semana con atuendo formal, la esperamos en /salon de gala de x empresa\ es permitido llevar a quien y cuantos quiera. Le esperamos ansiosamente

Atte. La asociación de comerciantes de Reim'

Hikari dio un largo suspiro, claro que sabía de esa gala, era el chisme de todos, no le gustaban los ricos pomposos y prepotentes, ni las reuniones formales, pero debía de ir, relacionarse con esos viejos con grandes monederos le sería beneficioso en un futuro, sin mencionar que de seguro habría licores de buena calidad y comida de todas partes, eso ya era una razón buena para ir, se intenta de convencer que la comida seria la mejor de su vida para evitar pensar en todas las largas y tediosas conversaciones sobre el capital neto que va a tener toda la noche, resopló por segunda vez, rindiéndose, mañana daría el anuncio para ver quién la acompañaría, ahora se iba a morir de sueño, Jeku hace horas que se durmió en su regazo y no pensaba hacer lo de la última vez quedándose dormida en el escritorio para luego despertarse con un dolor de espalda y tremendas ojeras, se levantó mientras sostenía a la pequeña cría en brazos y se dirigió a su alcoba, cambiándose después de dejar al dragón en su camita, al fin era hora de descansar, no faltó mucho para que después de arroparse entre las sedosas y cálidas mantas, se deslizara al país de los sueños.

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Publicado: 07/04/22

Editado: ???

Palabras: 1365

Esta vez terminé antes de lo planeado y este capitulo me encantó mucho, solo yó publico tan tarde, como sea, tomenlo como una disculpa por no actualizar rápido los primeros capítulos y porque los ultimos que fueron algo cortos, espero les guste, una mensión y agradecimiento a: 

-Din⚓🎴

(••÷ ģù𝒾𝐀ᗪᗩ 𝓟𝓸𝐑 l𝐀 ℓ𝕦ηά ÷••) [Sinbad x Lectora/OC]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora