Capítulo 34 - Retribución infeliz

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"......"

Shen Cheng guardó silencio durante mucho tiempo, miró a Jian Shiwu y habló: "¿Sólo te preocupa esto?".

Jian Shiwu miró a Ji Beichuan, que parecía una cabeza de cerdo, y jadeó suavemente, como si temiera que Shen Cheng no lo entendiera: "En caso de que la gente lo vea, ¿cuánto daño pueden hacer los chismes? aunque todos sabemos que Ji Beichuan merece ser golpeado, pero esa gente no puede decir nada indiscriminadamente".

Ji Beichuan, que estaba tumbado en el suelo, apretó los dientes mientras escuchaba, su voz temblaba de rabia, "Jian Shiwu... eres tan vicioso".

Al final de la frase, recibió otra patada de Shen Cheng.

Jian Shiwu miró hacia atrás y tomó aire.

La gente siempre recibe bofetadas muy rápido. Dijo que ya no tenía miedo de Shen Cheng, pero ahora temblaba incontroladamente, no por otra cosa, sino por el aspecto sombrío y despiadado de Shen Cheng, que coincidía instantáneamente con el de la persona de su vida anterior, quizá porque en esta vida Shen Cheng había actuado de forma demasiado inofensiva. Jian Shiwu era como una rana sumergida en agua caliente, olvidando de repente que Shen Cheng no era un perrito dócil, sino un lobo mortal y despiadado.

La primera vez que vio a Shen Cheng, sintió como si hubiera visto algo en su vida anterior cuando sujetaba a Ji Beichuan, los gritos en la habitación cuando Shen Cheng se ocupaba de sus subordinados que le habían traicionado sin expresión, cómo Shen Cheng se ocupaba de sus enemigos en el mercado con crueldad, lo decisivo y despiadado que era al tratar con esa gente, igual que no dudaba en atacarle a él y a su familia.

Los aullidos de Ji Beichuan en el suelo hicieron que Jian Shiwu volviera a sus cabales: "Te atreves a pegarme, te atreves a pegarme Shen Cheng, te arrepentirás, cuando vuelva más tarde yo..."

Sus palabras estaban siendo gritadas cuando de repente, las luces de toda la mansión parpadearon por un momento.

Al segundo siguiente

Las luces se apagaron.

La luz de todo el mundo desapareció en un instante, los gritos de pánico llegaron desde el piso de abajo, el caos, la oscuridad magnificó el miedo, todo el mundo estaba en desorden, era tarde en la noche y no había ni un solo rayo de luz.

Jian Shiwu también tenía un poco de pánico: "¿Qué pasa?"

Extendió la mano para tocar algo a lo que agarrarse, y alguien le tendió la mano a su lado. La voz de Shen Cheng era extraordinariamente clara en la oscuridad: "No tengas miedo".

Ji Beichuan también estaba un poco asustado, dijo: "¿Qué pasa? ¿Qué es lo que está mal? ¿Por qué está oscuro de repente? ¿Un apagón repentino asustará a la abuela, la abuela, no ha tomado su medicina todavía".

Shen Cheng arrugó las cejas, y en la oscuridad también agarró a Ji Beichuan precisamente para atraerlo hacia sí, su voz con opresión y escrutinio: "¿Quién te dio la idea de cambiar la medicina?"

Ji Beichuan no quiso decirlo.

Pero las siguientes palabras de Shen Cheng le hicieron entrar en pánico: "Esta sección del pasillo está vigilada, ¿qué crees que te haría padre si lo viera?".

Ji Beichuan soltó: "¡Imposible, no hay vigilancia!".

Shen Cheng se mofó: "Gracias a que has vivido en esta mansión durante tanto tiempo, estás confundido, ¡¿dónde hay un lugar que no esté vigilado?!"

"..."

Los ojos de Ji Beichuan se fueron abriendo poco a poco, su cuerpo sintió una frialdad por todo el cuerpo, lo olvidó, no pensó en esto porque inconscientemente sentía que la hermana Li no le mentiría, no, ¿cómo podría ser? ¿cómo podría la hermana Li hacerle daño? ¿de qué le serviría hacerlo?

Renacido como la ex esposa del protagonista paranoicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora