Él me pertenece

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Al día siguiente.
La pareja estaba dormida abrazos uno en los brazos del otro.
Él fue el primero en despertar, vio a su bella dama durmiendo dulcemente, la beso suavemente y fue a ducharse, después de un rato Hunkar despertó, noto que Ali estaba en la ducha, mientras ella busco que ponerse. En ese momento recibió una llamada.
H: Alo?
- ¿Sra. Hünkar?
H: Si con ella.
- La llamamos de gendarmeria, la Sra. Behice Hekimoğlu desea hablar con usted.
H: ¿Es seguro que hable con ella?
- De eso no se preocupe, nosotros estaremos vigilando cada movimiento de la mujer, y estará en su celda.
H: Esta bien, iré.

Hünkar creyó que lo mejor sería no decirle nada a su esposo, ya que no la dejaría ir, ella tenía mucha curiosidad, así que invento algún tipo de excusa.

Ali Rahmet salió de la ducha y vio a la mujer con una vista muy pensativa mirando por la ventana, él se acerca a ella interrumpiendo sus pensamientos.
A: Buenos días mi amor.
H: Buenos días querido.
A: Estás muy pensativa hoy, ¿sucede algo?
H: Por supuesto que no amor, todo está bien, y sobre todo por la bella noche que hemos pasado.
A: Fue grandiosa amor.
H: Ali hoy debo hacer unas cosas en la empresa y después tal vez vaya a visitar a Berika.
A: Esta bien, me avisas para ir a buscarte cuando termines tus asuntos.

Ella asiste con la cabeza mostrando una sonrisa.

Ambos se vistieron y bajaron a desayunar.
Después el matrimonio se levantó y se retiraron de la mansión. Ali como buen esposo dejó a Hünkar en la empresa, y el se fue a la suya, ambos tenían asustos que resolver, pero lo que más la inquietaba a Hünkar de que querrá hablar Behice, esa mujer nunca ha demostrado tener buenas intenciones, pero no Hünkar no le tenía miedo.
Paso unas horas y según Hünkar iría a ver a su amiga Berika, pero todo fue una simple mentira.

Llegó a gendarmeria.

-Sra. Hünkar, bienvenida.
H: Gracias, entonces, a lo que vine, llevenme con ella.

Caminando por pasillo largo, oscuro y un poco frío, Hünkar llegó a la celda de Behice. La mujer tenía una mirada de desprecio hacia Hünkar, pero cuál es la intención de Behice.

B: Hünkar Fekeli, que agradable visita.
H: Sin rodeos, ¿qué quieres, por qué deseabas verme?
B: No te agrada verme detrás las rejas, ¿no eres feliz ahora? ¿Deseas algo más para que por fin seas completamente feliz? , desearía haberme a riesgado a matarte Hünkar.
H: No lo lograste, no puedes desear algo, que jamás pasará.

Hünkar siempre que estaba frente de Behice, demostraba tener el carácter de mismísimo Diablo.

B: Qué te asegura que serás feliz Hünkar.
H: No sé qué deseas, sabes que tus palabras no me lastimaran y si vine acá para escuchar eso, entonces perdí mi tiempo. - da unos pasos.
B: ¿Estás segura de que Ali Rahmet no te fue infiel conmigo? -Hünkar frenando para oír a Behice, voltea a verla.
H: ¿De qué hablas?
B: Esa noche, la fiesta en el club, después de que lo rechazaste él fue por mi al club, fuimos a su casa, adivina quien estaba para consolarlo.
Al principio Hünkar dudo, como sabia ella que lo había rechazado esa noche. Pero se mantuvo firme.
H: Te diré algo, se lo mucho que Ali Rahmet me ama, y no creo que haya gastado cierta energía para estar con alguien como tú, mírate, él no es tan estúpido, si hubiese sido infiel creo que sería con algo que mínimo me llegue a los talones.
B: Si que tienes ego Hünkar.
H: Cómo no tenerlo, si escucho tus ridículas historias para separarme de mi esposo, sueñas con algo que yo tengo todas las noches. - le sonríe.
B: Ja! Si es muy enérgico en la cama.
Hünkar rodeando los ojos y una sonrisa malvada.
H: De hecho si, tienes toda la razón, es muy bueno en la cama, no de hecho es increíble, si quieres te cuento lo que hicimos anoche, él me tom...
B: ¡Cállate perra!
H:  Ay lo siento, pensé que necesitas que te contará un poco para que pudieras seguir imaginado. Tranquila no me pondré celosa con algo que simplemente pasa en tu cabeza, él tienes talentos que simplemente jamás sabrás. - se ríe.
B: ¡Maldita!, ¡él será mío! Oíste ¡mío!.

Hünkar con una gran sonrisa de  satisfacción se retira del lugar.

La mujer al salir decidió ir a visitar a su esposo a la empresa. Al entrar a la oficina se acerca a él.

A: Hünkar ¿qué haces aquí, qué sorpresa?
H: Amor, bésame.
A: ¿Qué?
H: Quiero que me beses.
Se acerca a él y lo besa apasionamente él no pudo resistirse a los labios de su mujer, sus manos en las caderas de Hünkar se aferró a él, después de unos minutos de ese largo beso. Ali Rahmet le preguntó.
A: Esto, qué fue.
H: Simplemente quiero recordar lo que me pertenece.
A: Estas actuando muy extraño, cuentame que sucedió, por que esa sonrisa con gran satisfacción se nota desde lejos querida. Ambos se sientan en el sofá.
H: Fui a ver a Behice, ella me llamó quería hablar conmigo.
A: Y de que hablaron para que llegaras así.
H: Ella me dijo que tú me habías engañado con ella, aquella noche de la fiesta en el Club.
A:  Hünkar eso nunc.... - es interrumpido.
H: Ali, no, sé que no pasó nada, me has desmotrado lo mucho que me amas y no podría dudar de eso.

Ella se levanta y se sienta en horcajadas sus miradas se encuentran, ella le acaricia el cabello.

H: Han pasado 40 años y sigo enamorada como aquella jovencita que se escapaba de casa para poder estar contigo.
A: Yo no se que clase de brujería me hiciste Hünkar, pero desde el día en que te vi llegar a la fiesta, supe que me había enamorado de ti. Hünkar, yo tengo miedo que alguien quiera a volver a destruir nuestro amor.
H: No me importa lo demás tu eres mi vida y daría el mundo entero por ti, lo que siento por ti, ni tu te lo podrías imaginar.
A: Estás haciendo lo que ni mis víctimas ni mis enemigos han hecho, te has adueñado de cada acción mía, cada respiración, cada pensamiento, te amo Hünkar.

Sus ojos estaban llenos de sentimientos que se transmitían con la mirada.

En ese momento fueron interrumpidos.

Y: Padrino te traje... - los ve.
Ay, lo siento no sabia que ustedes.
H: Yilmaz no te preocupes, pasa.
Se aleja de Ali Rahmet.
Y: Discúlpenme.
H: Mi amor, iré al baño y volveré.
A: Esta bien.
Hünkar un poco avergonzada sale de la oficina.
Y: Me gustaría que mi esposa me hiciera este tipo de visitas. Se ríe.
A: Que envidioso eres hijo. Se ríe también mostrando su gran felicidad.
Y: Padrino los veo muy felices, deberíamos hacer una gran fiesta ¿Te  parece?
A: Creo que sería buena idea, lo hablaré con Hünkar y Demir.
Ven unos papeles y Yilmaz se retira. Entra Hünkar.
H: Que vergüenza que Yilmaz nos haya encontrado así.
A: Mi vida, no te tortures, él entiende lo mucho que nos amamos. Ya terminé por hoy, ¿nos vamos? Quiero ir a ver a nuestro hijo.
H: Si vamos, extraño a mis nietos.

Se toman de la mano y salen de la empresa. Se dirigen a la mansión de Demir.

Mientras tanto Behice dentro de la cárcel intentaba informarse sobre el matrimonio Fekeli.

¿Logrará Behice poder separarlos?

B: Si no hay alguien que pueda separarlos, entonces uno de ellos debe morir......




Tenias que ser tú /Hünkar Y Fekeli Donde viven las historias. Descúbrelo ahora