➶ ໑ 𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟎𝟏 ᘒ ꒦ 🜸

401 27 3
                                    

El aire se queda atrapado en mis pulmones, ardiendo, mientras doy vueltas delante de la furgoneta, asomándome al interior, examinando las profundidades en penumbra. Es muy semejante a otra furgoneta que conocí no hace mucho tiempo, y aunque esta está vacía, pronto ocuparé su espacio. Yo solo. Me duelen los ojos de mirar tan fijamente la que, dentro de poco, será mi prisión, y parpadeo deprisa. Me recuerdo a mí mismo que esto es decisión mía.

-No tienes por qué hacerlo. - Me dice Jeno, y me coge la mano y acaricia la parte interna de la muñeca, logrando que mi pulso vuelva a la vida. De repente, recuerdo cómo respirar. Con él todo es siempre más fácil, más soportable. Incluso esto. Asiento con la cabeza, aunque el miedo se retuerce en mi interior como una serpiente. Necesito hacer acopio de todo lo que tengo para liberar la mano y agarrar el borde de la puerta.

-Sí que tengo que hacerlo. - Replico.

-Podemos buscar otra manera...

-No. Esto funcionará. Es idea mía, y por supuesto que creo en ella. - Los he convencido a todos, rebatiendo sus protestas hasta que han estado de acuerdo los tres, Jeno, Johnny y Haechan. Ya hemos llegado hasta este punto. Hemos dejado a mi hermano a varios kilómetros de aquí, esperando, escondido hasta que Jeno y Johnny vuelvan a por él. La expresión de Jeno se tensa y parece mayor, cansado, pero aun dolorosamente hermoso. Pestañeo y deslizo los dedos por su cara, por sus mandíbulas cuadradas con barba de unos días.

-Todo va a ir bien. - Lo tranquilizo. -Sólo tienen que ceñirse al plan.

-No hagas ninguna estupidez ahí dentro... No intentes ser un hero... - Le aprieto los labios con los dedos para que guarde silencio, y disfruto de su textura firme y fresca. Sus ojos se dulcifican, con sus tonos dorados, marrones y verdes, como un bosque en otoño. Algo se despliega en mi pecho, como siempre que Jeno me mira de ese modo.

Tras respirar hondo, me giro hacia Johnny, algo cohibido porque pueda estar observándonos, pero él contempla la línea de árboles y da patadas al suelo. Aun así, yo puedo sentirlo a través de la conexión mutua que compartimos. Trata de ofrecernos espacio a Jeno y a mí, aunque percibo cómo se concentra en evitar mirarnos... Sus esfuerzos por ocultar el malestar que serpentea en su interior.

Espero que mire. Puede que incluso desee que lo haga. Toda esta historia del vínculo que compartimos todavía me resulta nueva. Cuando Johnny mira por fin, asiento con la cabeza y él me devuelve el gesto.

Formo un pequeño círculo con un dedo y, en voz lo bastante alta para que quede claro que estoy dirigiéndome a los dos, digo: -Ahora, de espaldas.

Una levísima sonrisa curva la boca de Jeno, pero obedece. Johnny también. Con los dos girados, me desvisto, centrándome en mis movimientos, todos muy pausados, al desatarme las zapatillas, quitarme los vaqueros... Doblo la ropa en un pulcro montón, con un cuidado extraordinario, como si ese acto fuera de la máxima importancia. Supongo que estoy prolongando el momento.

Me quedo mirando la espalda de Jeno, el suave algodón gris de su camiseta, tensado sobre sus anchos omóplatos. El aire se desliza por mi cuerpo y el sol me besa la piel. Ahora es cuando se supone que debo subir a la furgoneta y cerrar las puertas. Ahora es cuando nos encaminamos a la guarida del lobo. Donde ellos me dejarán. Me abandonarán... A petición mía.

Si las cosas salen mal... Pero no, rechazo la idea diciéndome: «No vayas por ahí». Sin embargo, la garganta se me contrae igualmente. De repente, agarro a Jeno por el hombro para obligarlo a girarse y pego mis labios a los suyos, en un beso que sabe mucho a despedida. Se lo doy todo. Pongo nuestros recuerdos en ese beso. Todo lo que hemos vivido. Nuestros días en Chaparral. Su familia -los cazadores intentando aniquilarme. La pérdida de Karina. Sehun intentando matarlo...-

!  ׅ࣪  alma de luz ׅ ࣪ nomin ✶ drakis [3] ~  ࣪ ׅDonde viven las historias. Descúbrelo ahora