XV

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"Por el amor de esa mujer
somos dos hombres con un mismo destino.
Pero yo se que ella me quiere a mi
y que juega contigo."

Dos hombres y un destino - David Bustamante.

En ese mismo momento que la noche llego a la celda colin empezó a actuar, con uno de los clavos más nuevos del lugar terminó por forzar su cerradura mientras enterraba aparte del metal en su muñeca pero lo sacó rápidamente e ignoro el dolor, hizo ...

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En ese mismo momento que la noche llego a la celda colin empezó a actuar, con uno de los clavos más nuevos del lugar terminó por forzar su cerradura mientras enterraba aparte del metal en su muñeca pero lo sacó rápidamente e ignoro el dolor, hizo lo mismo con Penelope pero evitó dañarla en el proceso.

Una vez se vieron liberados dado el poco tiempo que tenían para escapar tomo entre sus manos las rendijas que parecían ventanillas y la rompío salió con dificultad para afuera y con sus piernas paso a quebrar las que tenían a penelope atrapada, la ayudó a subir y en el momento que se encontraban afuera llegó el hombre que les habló la última vez.

Al verlos fuera empezó a dispararles con un arma y él cubio a Penelope mientras escapaban del lugar, se entraban en un sector muy alejado del sector alto de la ciudad ya que a millas de distancia veían las luces del concurrido Mayfair.

¿Colin y si no encontramos forma de volver? ¿Que nos pasara si nos vuelven a atrapar? - preguntó ella con leve temor en su voz por lo que él la abrazo para luego tomar entre sus manos su rostro.

Nada te volverá a suceder mientras esté a tú lado, nunca me lo perdonaría - le dijo pero en vez de recibir alguna respuesta ella rompió las faldas de su vestido y envolvió la parte erida de su muñeca para que la sangre dejara de fluir.

Luego tomó con su mano con la cual no se encontraba erido y ambos se refugiaron en la espesura del bosque donde minutos después se adentro el hombre seguido de otros dos de sus trabajadores.

Fueron rápidamente seguidos por un grupo de búsqueda pequeño compuesto por el Príncipe, varios guardias y los hermanos Bridgerton mayores.

Esa misma noche una vez colin se percato que los seguían los secuestradores e hizo que ellos durmieran abrazados mientras se refugiaron en el tronco hueco de un árbol, el sueño fue un efecto colateral ya que estaban agotados de tanto caminar, a la mañana siguiente se encontró fuera de su escondite y con camisa abierta ya que penelope estaba conteniendo la sangre que brotaba de una pequeña herida de bala serca de sus riñones.

Eso explica porque se sentía tan cansado mientras más huían de sus captores, la adrenalina no le permitía seguir una caminata normal de largas distancias como las que recorría en el extranjero.

No te duermas colin - le pidió ella mientras notaba que la bala estaba a su lado totalmente en sargentada dandose cuenta que ella rompió su corse apra poder quitar la bala de su cuerpo.

El príncipe azul. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora