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¿La locura? Bien, locura es hacer una y otra vez lo mismo, esperando que la próxima vez el resultado sea diferente, o al menos hasta que tú mente te haga créer que así sera.
Ver el cielo nocturno y notar la batiseñal me hacía ver cómo esta ciudad se hundía día tras día en su miseria, la única razón por la cual temerle a la noche era mi motivación para adentrarme en ella.
Desde hace mucho, llegaste a cambiar mi vida y jamás pude agradecerte como lo mereces, muchos creen que la empeoraste y me destrozaste, yo creo más bien que la hiciste más divertida ¡Mírame! Ahora siempre estoy sonriendo.
— ¡Vamos! No tengo toda la noche — Le grite desesperada al cajero apuntandole con mi arma, amaba los cambios así que decidí “tomar prestados” unos hermosos atuendos de la boutique más cara de ciudad gótica.
¿Genial no?
— ¡Eso, eso!, quiero todo el dinero y la ropa en estás bonitas bolsas — Sonreí mientras tomaba uno de los vestidos y di una vuelta con el, el pobre hombre metía todo en las elegantes bolsas de la tienda.
Mi diversión se vio interrumpida cuando las luces del lugar parpadearon dejando en oscuridad todo unos segundos, más que preocuparme sonreí sintiendo su presencia detrás de mi.
— ¡Bienvenido a la diversión, cariño! ¿Te apetece un 212 de la sección de caballeros? — Le pregunte sin mirarlo pero soltando una sonrisa de emoción por saber que estaba aquí.
— Deja todo eso Blue Rose, se acabó la diversión — a pesar de sus frías palabras y profunda voz, me comencé a reír tirando el vestido que tenía en manos.
— Hoy no estás de humor aparentemente — Camine lentamente hasta quedar enfrente, tuve que levantar un poco la mirada para verlo a los ojos debido a su altura — Adelante, comencémos con la diversión, Batman.
Soltó el primer golpe el cual esquivé con éxito, era ágil y fuerte, pero yo lo esquivaba y devolvía los golpes con rudeza, a mi caballero oscuro le gusta jugar rudo.
Estuvo apunto de noquearme pero rápidamente lo esquivé tomando una de las bolsas con el dinero huyendo por las escaleras del lugar.
Escuchaba sus apresurados pasos detrás de mi, yo no podía evitar reír por la escena, siempre era un placer que Batman estuviera detrás de mi, realmente era un sueño para mí.
