𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝟐: 𝑩𝒊𝒆𝒏𝒗𝒆𝒏𝒊𝒅𝒂 𝒂 𝑪𝒊𝒖𝒅𝒂𝒅 𝑹𝒆𝒑𝒖́𝒃𝒍𝒊𝒄𝒂

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Sarah.

Martes por mañana y yo estoy levantada desde las 5:00 a.m porque tenía que estar con mi padre en el consejo y entre otras cosas, supuestamente dice que en algún momento yo estaré en su lugar y tenía que aprender todo desde ya, ¡Divertido!... No es que no quiera seguir el legado de mi padre, pero realmente estar en el consejo no estaba en mi lista de deseos y nunca lo estará.

En estos momentos estaba sentada al rededor de la gran mesa, sentada a un lado de mi padre, siendo sincera no prestaba mucho atención, tenía sueño y hambre y obvio que ganas de irme. No tenía mucha idea de lo que hablaban, yo solamente asentía cunado los demás lo hacían y ya. En un momento entró alguien de golpe, haciendo que me sacará de mi burbuja, era de la policía metal interrumpiendo la conversación de todos, obvio que las miradas se dirigieron a este para que de el motivo de interrumpir una reunión así

–La jefa Lin Beifong, solicita la presencia del consejal Tenzin en la comisaría principal, debido a un inconveniente con el Avatar Korra que se encuentra con ella.– Una vez dicho aquello se retiró sin más, yo solo dirigí la mirada a mi padre y el me miró a mi, es obvio que ninguno entendía porque Korra estaba acá y mucho menos es que había avisado de aquello.

–Damos la reunión por finalizada hasta poder retomarla nuevamente, ahora sí me disculpan me retiro con Sarah.– Eso significaba que nos podíamos levantar e irnos, cosa que hicimos con mi padre, ambos nos retiramos del lugar para ir camino a la comisaría, la cuál por fortuna estaba bastante cerca.

En cuanto entramos, mi padre me hizo esperar en lo que el iba por Korra, yo solamente me senté y esperé por ellos. En parte me alegraba tener a Korra aquí, podría significar que se quedará y entrenará aquí mismo, pero también podría significar que se iría nuevamente así como llegó, no quería sacar falsas conclusiones y menos darme esperanzas de algo que no estaba 100% de lo que podría pasar. Habré esperando media hora, no más de eso, pero sonreí levemente al ver a mi padre venir con Korra detrás de ella, obviamente nos abrazamos cuando estuvimos cerca y las sonrisas aparecieron inmediatamente.

–¿Cuando llegaste? ¿Cómo llegaste? ¿Por qué no avisaste que estabas acá?– Inmediatamente la ataque de preguntas y paré de hacerlo al sentir la mano de mi padre en mi hombro.

–Pronto nos contará todo, ahora vayamos al templo, allí podremos hablar mejor.– Ambas asentimos ante lo que dijo Tenzin por lo que nos dirigimos a la salida, fuimos hasta el muelle para así subir al barco que nos llevaría al templo, pude ver a Naga sentada a un lado de Korra, por lo qué decidí acercarme hasta ella, me apoye en la baranda y simplemente me dedique a mirar el paisaje.

–¿Crees que Tenzin me mande de nuevo a casa?–Habló Korra primero, largue un suspiro y dirigí mi mirada a ella la cual ya me estaba viendo, le dedique una sonrisa pequeña y así vez me encongi de hombros.

–Por primera vez, no tengo idea de lo que hará mi padre, puede hacerte quedar, así como hacerte ir también... Sabes que no en todas las decisiones soy participe, y creo que estás es una de ella, pero realmente me gustaría que te quedarás con nosotros.–La sonrisa que le daba era sincera, nuestra amistad es una de las más grandes, pudimos haber crecido juntas, pero teníamos distintas responsabilidades y aún así nunca se nos pidió ser las mejores amigas. Yo sabía todo de ella, así como ella de mi, pero solamente llegas hasta ese punto, solamente amigas y ya.

–Me encantaría quedarme, ya veré como hago para convencer a Tenzin, aunque sea alguien serio, tiene su lado sensible.– A mi solamente me hizo soltar una pequeña risa ante aquello, pues razón tenía, Tenzin era alguien estricto y serio, pero también era amable y sensible con sus más cercanos.

𝗕𝗼𝗼𝗸 𝟭 - 𝑺𝒊𝒎𝒑𝒍𝒆𝒎𝒆𝒏𝒕𝒆 𝒆𝒍𝒍𝒂 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora