⚔𝙳𝚊𝚛𝚔 𝚂𝚌𝚊𝚛𝚜⚔ ᴇɴᴇᴍɪsᴛᴀᴅ •{Piggy AU}•

❝I.Momento de paz░⍟❞

⚔𝙳𝚊𝚛𝚔 𝚂𝚌𝚊𝚛𝚜⚔ ᴇɴᴇᴍɪsᴛᴀᴅ

Todos los presentes se mantuvieron en silencio al oír aquél fastidiosos chirrido que provocaba la puerta cada vez que se abría. Observaron como una joven que portaba un parche en su ojo derecho entraba a la sala de reuniones, acompañada por tres hombres que la superaban en altura: los cuatro conformaban el grupo elite en la organización T.S.P.

—Bueno, creo que ya todos se imaginan porque los convoque a esta reunión...
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𝘾𝙖𝙥𝙞𝙩𝙪𝙡𝙤 1: “Momento de paz”

La tarde estaba muy tranquila... Quizás demaciado tranquila para estar hablando de la ciudad de Lucella.

No ocurrió nada nuevo ni interesante ese día, por lo que la detective Zimmer había tenido tiempo para terminar su trabajo pendiente y entregarlo. Ya no había nada por hacer pero quería quedarse por si surgía algo a último minuto.

—No puedo creer que encerio acabas de tomar tres tazas de café en menos de diez minutos... —Murmuró el oficial Dave Doggy, sorprendido por la poco saludable pero curiosa habilidad de su compañera.

—El café gratis es mi única razón para no renunciar —Anunció dando su primer sorbo a la cuarta taza del día—. Oye... No es por ser grosera ni nada, pero... ¿Por qué estás aquí? ¿No sé supone que tienes el día libre?

El mayor se quedó observando en silencio a la detective unos momentos mientras trataba de pensar en una respuesta más “profesional”.

—¿A caso no puedo quedarme aquí a ayudar a mi mejor amiga desde la infancia? —Interrogó con falsa indignación.

Skylar, mirando mal al oficial, habló:

—Solo vienes por las donas, ¿Verdad?

—Usted es muy lista Sherlock Holmes...

Ambos rieron ante el ocurrente apodo que el de ojos ámbar le habia dado a su superior.

Pasaron algunas horas así; riendo y conversando de diversos temas para aprovechar su tiempo libre en la estación, un lindo momento de paz para los dos. Cuando cayó la noche y su jefe les ordenó que se retiraran del lugar, salieron juntos de la estación y caminaron hasta el centro comercial para comprar algunas cosas para sus hogares...

—Dave... —Llamó la mujer, con claros nervios en su voz. El mencionado solo la observó en silencio, esperando que la oji-gris siguiera hablando—. Crees... ¿Crees que mañana puedas acompañarme al cementerio? Le prometí a Sammy que iríamos a visitar a su padre... No quiero llorar frente a mi hijo —Finalizó con la voz quebrada. Ya habían pasado más de un año desde la muerte de su marido, y aún así no se animaba a visitar su tumba. Sentía que hacerlo solo sería hechar más sal a la herida pero si hijo insistía en llevar algunas flores a su difunto padre...

—Está bien... Yo también debo ir de todas formas, Verónica a estado muy insistente con visitar a sus padres... Hace dos meses que no los ve... —Recordó la voz de su hija preguntando todos los días cuando visitarian a sus padres biológicos—. ¡En fin! ¿Quieres que hablemos sobre “eso” ahora o prefieres esperar...?

La menor negó con la cabeza.

—No, yo no... Quizás... Quizás mañana...

—Bien...