Capítulo 5

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Después de todo lo ocurrido aquel sofocante y hormonal día, Katsuki se dirigía a la universidad con un humor de perros. Gruñía a cualquiera que tuviera el gran valor de acercarse, realmente lo menos que necesitaba era un idiota a su alrededor, aunque siempre había uno que no miraba las advertencias.

Como el pelos de mierda que con tan solo percatarse de su presencia ya venía como estúpido con una sonrisa saludando con un aura mas brillante que el puto sol.

Sin duda molesto.

-¿Bro que tal?

Pero no respondió nada, trato de ignorarlo pensando que de esa forma se iría de una vez.

Pero era Kirishima.

-Oi amigo, ¿Estas bien? -preguntó al ver la cara que el rubio tenía en ese momento, una de molestia y frustración.

-No te metas en lo que no te importa.

-Pero si me importa, además es imposible no meterme en los asuntos de mis amigos mas importantes.

Katsuki iba a responder algo por las palabras dulzonas del pelirrojo pero en cuanto menos lo pensó otro idiota ya estaba encima de él.

-¡Bakubro! -llegó Denki para abrazar a Katsuki del brazo. -¿Como te fue con el lindo alfa de ayer?

Dijo burlon sabiendo que era de molestia para el chico de ojos rojos y cabello cenizo.

Katsuki se sonrojo al recordar lo que había pasado el día anterior, específicamente a Deku encima de él y frotando sus cuerpos con necesidad, la mirada esmeralda con tiernos sonrojos en sus mejillas y su respiración entrecortada.

-¡Q-QUE MIERDA TE IMPORTA!

Los dos amigos vieron como el rubio cenizo se iba dejandolos lejos y con caras sorprendidas.

-¿Estas pensando lo mismo que yo? -preguntó Kirishima con una sonrisa.

-Si piensas que ellos cogieron entonces si.

-¡¿Q-Que?! ¡¡no!! No me refería a eso, bro yo pensaba en que había pasado algo pero no tanto, nuestro bro no tendría tanta suerte.

La risa de Kaminari contagió a Ejiro y los dos empezaron a mirarse para luego reír más.

Izuku se encamino a la Universidad no sin antes con los supresores que le dio su Doctor, unos especiales que les daban a los jóvenes que acababan de despertar su segundo sexo ya que al principio no había control alguno en los primeros celos.

Y para Izuku a pesar de tener ya sus 18, tenía sus primeros celos como si tuviera 14.

Llegó al aula donde por suerte de su tranquilidad esa clase no la compartía con el omega temperamental y se sentó a lado de Uraraka y Tsuyu.

-Hola chicas. -saludó con alegría.

-Izuku-kun ¿Cómo estas? -dijo la castaña para sonreirle tiernamente.

-Me siento muy bien, de echo me siento renovado y con energía.

Izuku tenía un aura tranquila y brillante, todos sonreían al mirarlo, su forma de ser tan lindo y adorable hacia del ambiente mas pacifico y de un aroma floral.

Porque sí, Deku empezaba a oler un poco mas, y el primero en percatarse fue un lindo omega que quedó encantado con el nuevo descubrimiento.

-Midoriya-chan, ¿Utilizas algún perfume? -pregunto el lindo omega de cabellos cafés y ojos azules.

Izuku le miro al momento en que se sentó a lado de su asiento.

-N-no ¿Por qué preguntas Mako-kun?

-Bueno es que note un olor a plantas y a menta en ti.

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