My Summer Love

Sabes Que Cuentas Conmigo.

Sonó mi teléfono haciendo que despertara y que Sam despertara de mal humor

– ¡Calla esa maldita cosa!– Grito Sam y me lanzo una almohada a la cara.

– ¡Si fueras un poco paciente podría contestar!– Le devolví la almohada –. ¿Hola?–Conteste el teléfono.

– Buenos días– Saludo Nolan riendo –. ¿Por qué tienes la voz ronca?

– Porque acabo de despertar… Hablando de despertar, ¿Por qué llamas a esta hora? Creí que me llamarías a las 3:00 pm– Bostecé.

– Mía, ¿Estas consiente de que hora es?– Rió.

– No… ¿Qué hora es?

– Mía, son las 4:00 pm– Rió esta vez mas fuerte.

– ¡¿Qué!?– Me levante al tiro de la cama –. ¡Sam!– Susurre–. ¡Sam!– Susurre esta vez mas fuerte mientras le lanzaba una almohada en la cara.

– ¿Qué quieres Mía?– Se tallo los ojos.

– ¡Son las 4:00 pm! ¡Levántate! ¡Nuestros padres nos mataran por dormir tanto!

Se levanto demasiado rápido que casi no pude ver cuando lo hizo y se metió al baño y cerro la puerta con seguro.

– ¡Hey! ¡Yo me iba a bañar primero! ¡Sal de ahí!– Golpee la puerta 3 veces.

– ¡Ibas!– Grito riendo

– ¡Sam! ¡Esto no es divertido!

– Lo siento Mía a las 4:30  voy a ir a la plaza con unos amigos.

– ¡Demonios!– Me rendí.

– ¿Qué paso por allá?– Pregunto riendo Nolan.

– Nada, solo el idiota de mi primo no me deja bañarme– Bufe.

– Bueno, adiós, ¿Te llamo al rato?

– ¡Claro que si! ¿Qué tipo de pregunta es esa?– Sonreí.

– Bueno, te llamare como ¿a las 6:00 pm?

– Claro, adiós.

– Adiós– Sonreí como tonta al colgar el teléfono.

– ¿Te gusta verdad?– Me sonrió pícaro.

– ¿De que hablas Sam?– Me hice la tonta que no sabia de que hablaba.

– De ese tal Nolan, te gusta…Lo se por las caras de idiota que ponías cuando hablabas con el– Sonrió pícaro.

– Cállate Sam– Suspire–. Me iré a bañar– Tome una toalla y me metí al baño.

¿Se nota demasiado que Nolan me atrae? No, no lo creo. Nunca antes había sido tan notoria con la persona que me atraía, siempre encerraba mis sentimientos y en vez de acercarme a la persona, me aislaba, pero esta vez, por raro que pareciera, estaba haciendo lo contrario.

Termine de bañarme y me coloque unos Jeans, una blusa color beige, unas botas y un abrigo que combinaba a la perfección.

– Mia– Sam llamo mi atención–. ¿Quieres ir conmigo y con mis amigos a la plaza por un helado?

– Claro… ¿Por qué no?– Bufe–. Espera– Lo mire sospechosa–. ¿Por qué me estas invitando?

– No te hagas ilusiones– Bufo–. Mamá me dijo que te invitara– Rodó lo ojos.

– Ok, dame 5 minutos y nos vamos– Tome la plancha para el cabello y empecé a peinarlo.

– Te espero afuera– Sam tomo las llaves y salió de la habitación cerrando la puerta.