Nuestros hijos Viajan Al Pasado

Pijamada, Solo dos dias

(NARRO YOP)

Al día siguiente las chicas estaban comprando, algunas cosas para hacer la pijamada. Los chicos decidieron acompañarlas al centro comercial, ellos le dijeron para ayudarlas con las cosas. Pero en realidad era para cuidarlas de los otros chicos.

Kanon: ustedes de verdad necesitan controlar más sus celos.

Karma: no me digas que tú jamás a sentido celos.

Kanon: por su puesto que no, ya que en el futuro amenaze a todos los chicos, de la escuela si se atrevían a algo con Aguri.

Lo decía como si fuera algo normal, mientras se acercaba a las chicas.

Sugino: definitivamente es tu hijo Karma.

Karma: acaso lo estabas dudando.

Isogai: no solo se parece a ti, también tiene tu personalidad aterradora.

Zack: si pero el también tiene la personalidad de Okuda.

Todos miran al pelinegro, que estaba escuchando su conversación.

Karma: en eso tienes razón, le gusta la ciencia igual que ella.

Karma miraba con ternura la imagen que tenía en frente. Kanon le estaba agarrando la mano a Okuda, mientras que hablaban feliz mente de cosas relacionadas a la ciencia.

Nakamura: chicos vamos a parar en esta tienda, primero.

Todos miraron la tienda de dulces, los niños fueron los primeros en entrar. Emocionados por ver tantos dulces los  chicos rieron por el acto de sus hijos del futuro. Pero también se dieron cuenta que Kayano había entrado también, emociónada eso le causó ternura a Nagisa.

Nagisa: si quieres puedo comprarte un dulce Kayano–san.

Kayano: enserio lo harías Nagisa.

La peliverde lo miraba emocionada el asiente, y eso provoca que Kayano lo abrazara. Nagisa estaba rojo, pero corresponde a su abrazo.

Karma: no te vayas a llevar toda la tienda Kanon.

Kanon: si, si, como digas papá.

Le saca la lengua con burla, Karma solo sonreía cuando ve a su amada Manami, estaba viendo una bolsita que tenía muchos chocolates. Karma lo nota y sonríe se acerca lentamente con la intención de asustar a Okuda–san. Se acerca a su oído.

Karma: ¿Que estás viendo Okuda–san?

La Azabache salto del susto, tocó su pecho y suspiro al ver a Karma.

Okuda: no me asustes así Karma–kun.

Karma: lo siento jaja, es que no me pude contener.

Ella se ríe también, con un leve sonrojo. Karma a escuchar le dedica una  sonrisa a su amada, cosa que ella noto y no pudo evitar sonrojarse.

Karma: Okuda, ¿Que estabas viendo? Algo te gusto en esta tienda.

Okuda: he, he.. y–yo digamos que me gustan estos dulces, pero no tengo suficiente dinero para comprarlos.

Karma: tranquila si quieres yo te lo compró.

Okuda: ¿He? N–No es.. es necesario Karma–kun.

Karma: no te preocupes es mi forma de pedir perdón, por haberte asustado.

El pelirrojo le guiña un ojo a la Azabache, ella asiente con la cabeza agachada avergonzada por que el chico que ella le gustaba. Le acababa de comprar sus dulces favoritos.