Capítulo 12: Entre cultivos y sonrojos

946 104 46
                                    

El fin de semana llegó tan pronto que apenas dejaba descansar a la eriza. ____ de encontraba libre al menos por esos dos días y estaba dispuesta a descansar. Había quedado con Tails para ir a dar una vuelta para ver a un viejo conocido, ya que debía traer unas cosas que le encargó.

Se encontraba sentada en una silla mientras veía como el zorro terminaba de arreglar las hélices de su querida nave.

—¿A dónde iremos tio? —le pregunta tratando de no sonar demasiado emocionada pero, es obvio que lo está.

—Cerca de la ciudad, Sonic me pidió que te llevará conmigo para que conozcas a alguien —le comentó mientras le daba el último ajuste a una tuerca, su rostro de encontraba ligeramente manchado de grasa—; quiere que conozcas un poco más a los que fuimos parte de su tiempo como héroe.

A la eriza la causaba mucha curiosidad el desconocer de quién se trataba y más porque su padre siempre la mantenía alejada de sus amigos. Pero según su tío, su padre al parecer estaba cambiando de idea.

—Supongo que solo desea que confíe más en él —se dijo a si misma mientras esbozaba una sonrisa.

—¿Estás lista ____?, partiremos en seguida —el de mirada celeste se limpiaba la suciedad la cara con un trapo.

Ella asintió, se incorporó para dirigirse a la avioneta y subirse en el asiento trasero. Tails dejó aquel trapo y se apresuró a subirse para ir directo a donde se encontraría Knuckles. Encendió su máquina y comenzó a despegar.

[…]

La brisa en las alturas era muy distinta a la que se podía sentir abajo. Era mas fresca, más pura, y relajante. La eriza miraba a su alrededor con gran emoción, el cielo era tan azul como lo vio alguna vez en los libros, las nubes tan blancas y con textura suave. Adoraba viajar con su tio, se sentía tan bien, tan libre.

—Casi como una avecilla que abandona el nido para conocer el mundo —musitó mientras dirigía su visión por delante—. ¿Falta mucho?

—De hecho, estamos a unos cuántos minutos, creo que te agradará conocer a Knuckles —le comentó mientras le daba una sonrisa—. Sonic me dijo que sería bueno para ti conocer a uno de sus camaradas.

—¡¿Vamos a conocer al señor Knuckles?! —dice encantada—. ¡Al fin voy a conocer a uno de sus amigos más fuertes!

La mirada de la chica deslumbró brillo en su totalidad, por fin podría conocer a alguien del pasado de su padre. Aunque claro, ya sabía que era el padre de Noal y Jaspher pero le encantaba la idea de verlo finalmente.

Unos minutos después y con Tails pidiéndole que viera por debajo de ellos, ____ se percató de que sobrevolaban unos campos de cultivos extensos y muy bien cuidados. Se encontraban lejos de la ciudad y aunque el paisaje era parecido a donde vivía la eriza, la cautivó el ver todas aquellas plantas con frutos.

[…]

Bajaron de la avioneta, ella caminaba detrás del zorro y mantenía la vista entre las plantas. Era una maravilla, si desde los cielos se veían enormes los campos, estando abajo se sintió tan pequeña. La naturaleza era sin duda lo mejor que podía existir en la vida, poseía tantos encantos que aunque pudiera conocerlos todos, estaría segura siempre existiría algo que la deslumbraría.

—¡Knuckles! —gritó el zorro llamando la atención de un equidna rojo que se acercaba hasta ellos mientras se quitaba un sombrero de paja.

La eriza devolvió su vista al frente y entonces por fin entendió. Sonic siempre le había dicho que Knuckles era un equidna de color rojo brillante, fornido y su apariencia la primera vez te hacía sentir un poco de miedo.

Predestinación (Shadow X Tn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora