Capítulo 9: ¿Ahora qué, Morgan?

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Holaa! Arriba les dejé la canción que escucha Jayden.

Ahora si pueden leer...

JAYDEN

—Jayden, levántate! —escucho un grito que proviene desde mi puerta, creo que es Anna. ¡Por Dios! de seguro no son ni las 7 de la mañana y me vienen a fastidiar tan temprano.

—Deja de molestarme. —digo para volver a acurrucarme en mi cama y tapar mi cabeza con la almohada, no sirve de nada porque al instante me quitan mis preciadas sábanas haciendo que muera de frío.

—Que no! Baja a desayunar o sino llamo a la señora Lily. —advierte Anna y quiero matarla, como se atreve a hablarme así—en realidad siempre lo ha hecho, es cómo una amiga— pero igual, no me gusta que me pongan de mal humor tan de mañana. No quiero molestar a mi madre, suficiente tiene con su trabajo ahora mismo, así que es mejor que Anna no le dijera nada.

—No! Ya bajo en 10min, pesada. —le digo y ella me lanza un cojín que ha tomado de uno de los sillones, golpeándome a su paso.

Me levanto de la cama yendo hacia al baño, luego de ducharme, voy hasta mi closet para ponerme el horrible uniforme que me toca usar siempre. Hablando de eso, hoy es lunes y eso significa volver a ver a la pelinegra. Es extraño, no es que quiera algo más allá con ella, solo que el día anterior me he comportado de una manera extraña. Me causa confusión, porque nunca soy de hacer cosas así o mostrar cariño a las personas, ¿entonces que me pasa? Es más, mejor ni lo pienso ya.

Bajo las escaleras con rapidez para ir a desayunar y que Anna no esté hablando después. Me siento en la isla que se encuentra en medio de la cocina y empiezo a comer.

—A lo que acabes, no es necesario que laves los platos. Lo haré yo, luego llegas tarde al colegio. —habla Anna, mientras se sirve un vaso de agua y yo solo asiento.

—Ok, ya me voy yendo. —le aviso y salgo de casa para subirme a mi Audi e ir al colegio.

El camino es ameno, gracias a que escucho la música de mi banda favorita Chase Atlantic, ahora mismo se encuentra sonando Right here por los altavoces del auto, sus canciones sin duda me ponen de buen humor siempre. No tardo mucho en llegar, bajo del auto rápido y me encamino en busca de mis amigos.

—Hey amigo, ¿dónde has estado? —pregunta James, una vez llego a su lado. Nos encontramos por los pasillos, todos parecen estar en su mundo y unos que otros nos miran de reojo.

—En mi casa. ¿Por qué? —cuestiono mirándolo con confusión.

—Porque en la fiesta te perdimos y no supimos más de ti. Además, a Jacob le pasó algo interesante o bueno eso me dijo. —me comenta James, en el instante en que se acerca Jacob a donde estamos y nos saluda.

—Ah sí Adams? Dime que cosa interesante te pasó en la fiesta. —digo molestándolo y este me mira irónico.

—Nada, es que hay una chica que llamó mi atención. —nos menciona y lo miramos sorprendidos. Porque a Jacob Adams ¿el chico que le gustan todas? Alguien que llame su atención de verdad, casi imposible.

—Quién es? ¿Es una de las nuevas o algo así? —lo interroga James queriendo saber quién es la causante para dejar a mi amigo así.

—Eso no les diré. No quiero que la conozcan aún. —nos indica y solo le resto importancia. Allá él y sus cosas.

***

Poco después suena el timbre anunciando que nos toca ir a las aulas. Me despido de los chicos y me encamino hacia mi clase, justo me toca Literatura y la profesora que me da esa materia, no es de mi agrado. Parece que tiene una especie de obsesión hacía mi cada que entro a su clase. Realmente es incómodo.

Contigo todo es diferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora