Sakurai estaba caminando de un lado a otro de la clase impaciente. Sus dos otros compañeros sentados en algún pupitre de la sala, uno con una cara totalmente seria e inmutable y la otra, para variar, en una postura que pareciera que intentara dormir para matar el tiempo.
— Oye, Sakura. — el mencionado giró impaciente su postura para dirigir su mirada a la chica.
Minako, al ver que tenía la atención del que se encontraba al frente de la sala, no hizo más que mover su mano lentamente señalando el borrador de la pizarra para luego apuntar arriba de la puerta con una sonrisa inocente.
— Alto y claro. — dijo el Haruno al captar el mensaje con una mirada cómplice compartida junto a la Uzumaki.
— Ese espantapájaros se arrepentirá de habernos hecho esperar por todas estas horas. — mencionó en susurros la única chica en el salón. — En fin. Es su culpa por llegar tarde 'ttebayo. — canturreo satisfecha.
— Es imposible que un jonin caiga en una broma tan absurda como esa. — añadió con monotonía Sasuke.
— Sisi como digas. — dijo con desinterés dirigiendo su mirada hacia la puerta.
Para sorpresa de los dos restantes en la habitación, el adulto no tardó más de unos segundos en llegar y caer en la "pequeña broma" de Sakurai.
— Ajajajaja jajajaja. No me puedo creer que de verdad cayera. — habló entre risas el autor de la broma.
— Pff jajajajaja. — le acompañó en esa risa su cómplice.
Sin saber por qué una gran sensación de déjà vu le invadía la mente, sin conocimiento de su origen y causa.
Su mente maquinó hasta llegar a la conclusión de que había sido uno de esos momentos vividos por su hermano mayor, los que ella había visto ya 12 años atrás. Ahora que se había graduado tendría que acostumbrarse a esta sensación familiar.
El profesor agarraba el borrador del suelo en silencio. Contemplando a su alrededor el que de ahora en adelante serían sus alumnos en caso de pasar el hasta ahora imbatible examen.
Para empezar se encontraba Haruno Sakurai, proveniente de una familia de civiles. Por los informes de la academia se sabía que tenía una fuerza considerable para un niño de su edad. Un niño travieso de la aldea de Konoha, gastando bromas pesadas a lo largo de los últimos años. Contaba con una personalidad alegre y positiva.
El segundo integrante del grupo, Uchiha Sasuke. Considerado un prodigio de su generación. Único superviviente de la masacre hecha por su hermano mayor donde todo su clan fue exterminado. Con una actitud seria, para hacer referencias, sería todo lo opuesto a Maito Gai.
Uzumaki Minako, último miembro del equipo. Se puede afirmar sin ningún tipo de duda como la persona más odiada en toda la aldea. Una persona a la que tener vigilada según anbu. Era de conocimiento entre los ninjas de élite que la jinchuriki protagonizaba excursiones de caza nocturna que llevaba a los recién renegados delante del Hokage. Conocida comúnmente por los habitantes como el monstruo de Konoha. Aunque mentiría si dijera que no tenía sentimientos encontrados con esta chica. Era la viva imagen de sus padres.
— Mmm... ¿Cómo debería decir esto...? Mi primera impresión de vosotros es... — expresó dudoso para decir su decisión final. — Sois irritantes.
Sus tres estudiantes tenían rostros de puro fastidio y de incredulidad, sin creerse que en serio ese sería su nuevo profesor.
꧁𓊈𒆜 ◯ ☾ 𒆜𓊉꧂
— A ver, por qué no hacéis una pequeña presentación de vosotros mismos. — dijo el profesor sentado en la barandilla de la azotea.
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Minako // Una nueva vida
FanfictionEl futuro que creía conocer era mentira. ¿Qué sucede cuando sabe el porqué todos la odian? Una niña nace en lugar de Naruto. Pareciera que el propio mundo la odia cuando todas las catástrofes la quieren de testigo. Cuando no tienes a nadie que te pr...