Minako // Una nueva vida

Capítulo 4

— Hola abuelo — dijo alegremente Minako mientras abría la puerta de su humilde morada.

— Por dios. Deja de llamarme así, me hace sentir más viejo de lo que estoy. — respondió entrando al apartamento de la niña con esa sonrisa de anciano que gritaba: "estoy muy viejo para esto".

Normal que Konoha este así si todos en el consejo estáis igual de viejos, retírate ya y deja el puesto de Hokage para otro 'ttebayo. A mí por ejemplo jeje.

— ¿Por qué has venido? El pago de este mes ya me lo diste, ya casi hace dos semanas. — preguntó curiosa porque solo solía venir para darle el dinero de cada mes.

— Y aun así estoy seguro de que te queda poco más de la mitad. No tendrías que ir tanto a Ichiraku, comer sano es esencial en esta vida. — empezó a sermonear el viejo.

— No ¿cómo crees? Jaja — desvío su mirada y soltó una risa nerviosa.

Maldito abuelo, tantos años viviendo y aún no ha sermoneado suficiente.

— Ahora que irás a la academia ninja necesitas comer sano todos los días y levantarte temprano. Se tiene que tener una vida saludable para tener un buen rendimiento durante el día. — y continuaba... recitando ese testamento llamado "la charla del abuelo" que por alguna razón era un requisito obligatorio para los usuarios poseedores del jutsu arrugas en la cara.

¡¿Espera, dijo academia?!

— ¿Dijiste academia? — preguntó anonadada ante la información.

— Claro, todos los niños cualificados para ir a ella entran a los 6 años. Evidentemente que vas a entrar ahora que ya tienes la edad.

— ¿Pero no se tenía que hacer un examen o algo así para entrar primero? — aún estaba confusa, ya que ella pensaba que al menos la avisaría.

— Tonterías, tú estás más que cualificada. — respondió como si fuera lo más obvio del mundo.

— Pero si yo no he hecho nada.

Aparte de eso, esto y lo aquello no hay nada, no debería de saber nada de eso otro tampoco.

— ¿Te crees que no he visto nada de eso? — Preguntó acusatoriamente.

— ¿A qué te refieres abuelo? — nerviosa se hizo la que no sabía, pero en realidad sí sabía.

Porfa que no sea lo de caminar por las paredes. Porfa que no sea lo de caminar por las malditas paredes.

— No te hagas la tonta, te he visto corriendo por los tejados más de una vez, comparado con algunos niños eres más que apta para entrar sin examen.

Menos mal que solo era eso 'ttebayo.

— ¿Entonces qué día empiezan las clases? — ya solo faltaba saber eso para poder deshacerse del plasta que tenía como Hokage con tranquilidad.

— En una semana. — contestó ni lento ni perezoso. — Las clases empiezan a las 9h.

— Ni en chiste me voy a despertar tan temprano.

— No llegues tarde a la ceremonia de ingreso. Adiós. — digo ignorándola y seguidamente se fue por esa puerta a la que Minako le estaba invitando con la mirada.

꧁𓊈𒆜 ◯ ☾ 𒆜𓊉꧂

— Venga Sasuke, no te deprimas. — consolaba Itachi a su hermano menor, el que estaba en su habitación sentado, con la espalda recostada en la pared mientras abrazaba sus rodillas. — Que no vayáis juntos a la escuela no significa que dejéis de ser amigos.