Mientras las cosas se complicaban en Holdvèr High, Lisa Maxwell llevaba días fuera del pueblo y sin prestar mucha atención a los hechos que ocurrían en el mismo, ella se había ido a un viaje en busca de respuestas con destino al instituto tecnológico de Massachusetts, donde se encontraría con una de sus mejores amigas y antigua pasante en su programa de televisión, Mia Mollins, ella era una chica de baja estatura, su cabello era castaño y rizado, solía vestir con una chaqueta larga durante las épocas más frías del año. Era la encargada de la edición y producción visual de su canal en redes sociales, pero a pesar de su talento, no quería dedicar su vida a ello, por lo que decidió dejar el trabajo y estudiar una prometedora carrera de Ingeniería.
Luego de conducir durante horas y por fin llegar al estacionamiento del instituto, Lisa bajó de su auto, llevaba puesta la misma indumentaria con la que visitó a la Anciana, unos lentes de sol y un pañuelo en su cabeza, bajo la lógica de Lisa, era el disfraz perfecto para estar encubierta. Mientras cerraba la puerta del auto, notó algo extraño, por un segundo, pensó haber visto su rostro reflejado sin su disfraz, pero de inmediato, un grito de felicidad a sus espaldas captó su atención.
—¡Lisa, querida amiga! ¿Cómo estás? — Exclamó Mia Mollins con los brazos abiertos.
—¡Mia! Debiste avisarme que me esperarías acá, se supone que estoy desaparecida, no debo tomar riesgos.
—¿Riesgos? ¿Has visto tu disfraz? — Dijo Mia mientras notaba la cara de estrés de Lisa. — Lo siento, mira tú cara, tienes ojeras ¿Cómo has estado?
— No he dormido bien en varios días, pero olvidando eso, me da gusto verte amiga y realmente lamento que me veas así.
—Tranquilízate, vamos a mi habitación a hablar con más seguridad, mi compañera de cuarto no está así que prácticamente estoy sola.
Las chicas entraron a los dormitorios de estudiantes, mientras caminaban, Lisa no paraba de observar el campus, no dejaba de recordar los momentos que había vivido durante sus años de estudio, sentía cierta nostalgia y echaba de menos esos días en los que todo parecía ser más fácil. Al llegar a la habitación Lisa se lanzó sobre la cama y Mia acomodó sus cosas a un costado.
—Supe lo que sucedió en tu apartamento y días después recibí tu llamada, ¿Qué rayos está sucediendo? — Preguntó Mia preocupada.
—Bueno, básicamente los sectarios que estábamos investigando, fueron a secuestrarme, pero pude escapar, me mude a una habitación en Little River y creo que la mejor forma de protegerme es que no sepan dónde estoy.
—Espera ¿Qué? ¿Estás bien? ¿Tu tío se enteró?
—Sí, pero no hizo nada al respecto, pero escucha, Mia, tuve razón durante todos estos años, el culto existe, todo es real y por fin tengo una prueba viva de ello.
Lisa le contó todo lo ocurrido a Mia, los detalles de su investigación, la noche del programa y las revelaciones de la Anciana, Mia no paraba de estar sorprendida ante todo lo que escuchaba y estaba orgullosa por todo lo que había conseguido a su amiga.
— Ya veo... Entonces lo lógico sería pensar que hay un aprendiz de brujo joven en el pueblo, probablemente en la escuela. — Dijo Mia.
—Exacto, de hecho, ahora mismo tengo un informante en el lugar, está interrogando a las chicas de último año de la escuela, ya que ellas son las primeras sospechosas
—Ok, pero eso fue hace días... ¿Has sabido algo?
—No lo quiero presionar, puesto que le di una misión un poco difícil para él, básicamente le dije a un introvertido que socializara.
—Vaya, que gran idea Lisa, está tan bien como tu disfraz de incógnito. —Dijo Mia de forma sarcástica.
—No te burles, él era mi única opción... Por cierto, no quiero volver a escuchar comentarios sobre mi disfraz — Manifestó Lisa visiblemente frustrada.
ESTÁS LEYENDO
Las Siete Alas
FantasyUn chico llamado Zack se ve sumergido en los secretos y susurros de un mundo oculto, estos lo llevan por una aventura fantástica y misteriosa, para descubrir el origen de los sucesos misteriosos que ocurren en su pueblo y descubrir quien es él realm...