Las Siete Alas

Capítulo 13: La Mina

Ninguno sabía lo que sucedía, pero tenían plena confianza en Zack. Sostenían sus armas firmemente y atravesaban el bosque siguiendo el cadáver andante, mientras más avanzaban los árboles se veían cada vez más dañados, algunos no tenían hojas, otros tenían sus troncos putrefactos, también notaron que había algunos charcos de agua, los cuales tenían un color verdoso y de ellos emanaba un olor desagradable.

—Si algún día van a ciénaga, se ve exactamente igual a este lugar, esto es exactamente lo que ocurre al usar magia oscura por tantos años en un lugar. —Mencionó Fiorella.

—¿Como nadie se dio cuenta de esto? —Preguntó Zack.

—¿Quien en su sano juicio vería un lugar así y continuaría? Claramente estamos en una zona no explorada del bosque —Afirmó Sara.

—Bueno, seremos los primeros. —Aseguró Carl. — Zack ¿Que más viste allá atrás? además de los niños, parecías estar hablando con alguien más. —Le Preguntó seguidamente.

—Creo que conocí a un ángel. —Dijo Zack ante la sorpresa de todos.

—¿Qué? ¿En serio? —Preguntó Justin sorprendido.

—Si... Dijo que su nombre era Azrael, creo que es quien nos está ayudando con el cadáver andante. —Aseguró Zack mientras lo señalaba.

—Genial, hablaste con el ángel de la muerte. —Mencionó Fiorella con un poco de sarcasmo y preocupación.

—Al menos parece que nos ayuda, suele decirse que cuando aparece significa que alguien está a punto de morir. —Aclaró Mia.

—¿Te dijo algo más? —Preguntó Sarah con curiosidad.

—Solo sonreía, de hecho, no habló directamente conmigo, sino a través de los niños, luego de eso de los llevó con él a través de un resplandor. —Aseguró Zack bastante pensativo.

Siguieron caminando hasta que en un momento vieron como el cadáver se desplomaba frente a ellos, al mirar hacía al frente vieron que se encontraban en una de las entradas de la mina, Asumieron que era una entrada alternativa, pues, no había nadie custodiando, al adentrarse, notaron que la mina tenía un aspecto bástate cálido a pesar de estar abandonada, estaba totalmente iluminada con lámparas de gas, en unas de las esquinas se encontraban algunas cabezas de animales sin piel, Mia teorizó, que se trataba de los animales que solían desaparecer de las granjas, continuaron hasta encontrar dos caminos, uno de los caminos estaba totalmente oscuro, mientras que el otro, que estaba iluminado, se escuchaban algunas voces. Decidieron tomar el camino iluminado, al dar unos pocos pasos se encontraron con uno de los brujos de espaldas, estaba hablando con alguien que se encontraba dentro de una celda, de inmediato Justin se abalanzó sobre él y le dio un golpe en la cabeza con su bate.

—¡Acabo de asesinar a alguien! —Exclamo Justin totalmente impactado y mientras lanzaba su bate al suelo.

—Tranquilízate, se lo merecía. —Dijo sarcásticamente una voz conocida proveniente de la celda.

Zack al acercarse a la celda vio que Lisa se encontraba allí adentro. —¡Lisa! ¿te encuentras bien? —preguntó Zack visiblemente emocionado por ver de nuevo a su amiga.

—¡No puede ser, estás aquí! —Exclamó Mia Emocionada mientras se apoyaba en los barrotes de la celda.

Tomaron las llaves que tenía el brujo en uno de sus bolsillos, ayudaron a lisa a levantarse, ya que tenía los pies muy heridos y algunos moretones en su cuerpo, así que entre Zack y Carl le dieron apoyo para que caminara.

—¿Qué rayos ocurrió en la entrada del pueblo? —Preguntó Zack

—Una maldita bruja volcó el auto, escapé como pude, pero me empezó a seguir por todo el bosque, hasta el punto donde tuve que quitarme casi toda mi ropa para distraerla e intentar escapar, de igual manera no lo logré y aquí estoy. —Dijo Lisa con un tono de voz cansado.