-Capítulo 14-

17 8 10
                                    

ADAM

Y allí estábamos. Toda la sala está llena de médicos, todos observando a Karen y ninguno hace nada útil. Pasadas unas horas Karen sigue consciente, pero no logra decir nada. Me acerco a la cama y acaricio sus manos.

-No sabes lo inútil que me siento al no poder ayudarte. Sólo sé decir que todo va a estar bien, pero sé perfectamente que no estás bien. Lo siento tanto... Te amo y no puedo hacer nada por ti...

-No puedes... Hacer na... Nada...

-Eh, no hables, es mejor que no hagas ningún tipo de esfuerzo.

Me acerco y me quedo a unos pocos centímetros de ella, mirándola profundamente a los ojos y pensando en que dentro de poco estará junto a Mia.

-Podría pasarme minutos, horas, mirándote, observando tus ojos cuando te ríes, la manera en la que hablas, tu precioso pelo, tu sonrisa... Pero ahora mismo sólo puedo ver como poco a poco te vas haciendo cada vez más débil, sin yo poder hacer nada para ayudarte..

Ella me agarra el rostro y me besa.

-Te... Te quiero...

Veo como Karen va cerrando los ojos poco a poco hasta que escucho el pitido que indica que ya no tiene pulso. Noto como mi corazón se rompe, mi alma se retuerce de sufrimiento, y mi cuerpo, aún cerca del de Karen, empieza a sentirse más y más derrotado. Grito lo más fuerte que puedo hasta que los médicos me separan de ella.

Mariposas (Parte 1) ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora