Bienvenida soledad

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Cuando menos lo esperas lo que más quieres se va.
Obviamente sabías que no iba a ser eterno, pero eso no te sirve de consolación.
Se ha ido, quién estaba contigo en los momentos más difíciles se ha ido. Quién pasaba contigo todas las noches de pesadillas, quién se sentaba en tu regazo cuando estabas mal y nunca te juzgaba se ha ido.
Aquella que vio todas tus lágrimas y llevaba contigo más de 10 años ya no está.
¿Y como me acuesto sabiendo que ya no vas a volver a estar al otro lado de la cama? ¿Cómo voy comer sabiendo que ya no voy a compartir mi comida contigo? ¿Cómo voy a vivir si mi vida ya no es a tu lado?
Que no, que no me vale que me digan que solo eres un perro. Has formado parte de mi mundo, he compartido todas mis risas contigo.
Has sido mi principal pensamiento cada vez que estaba ingresada y la razón por la que me costaba tomarme las pastillas. Sigues siendo mi pequeña aunque no estés. Y te sigo necesitando.

Tu pérdida me ha enseñado que nada es eterno, qué es mejor no acostumbrarse a nada, no atarse a nadie y no permanecer al lado de ninguna persona. Al final todos se van. Y te quedas sola. Los para siempre ya no existen. La felicidad ya no existe para mí. Tu recuerdo es lo único que me queda. ¿Qué voy a hacer sin ti?

Cuando más he necesitado ayuda nadie ha aparecido, nadie ha venido corriendo a darme un abrazo, pues pequeña, eras tú la única que estabas  siempre.

Bienvenida soledad, no hagas muchos estragos.

CONFESIONES DE UN CORAZÓN QUE NO LATE - TLPDonde viven las historias. Descúbrelo ahora