¿Aris?

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Pasaron unas cuantas horas desde que vimos la publicación de las notas junto a Eliot, me acompañó hasta mi casa y de ahí decidió irse a la suya, quedamos en que seguiríamos hablando para vernos en uno de esos días.
Recuerdo estar solo en mi habitación cuando la notificación de mi celular sonó y me lancé de un extremo de la cama al otro para poder agarrarlo. Era aquél chico misterioso que había empezado a escribirme días antes. En esta ocasión lo que había puesto era «cómo estás» al fin ponía otra cosa, ya comenzaba a creer que no sabía decir nada más que 'Hola'.

Le respondí al cabo de unos cuantos minutos y ahí empezamos una verdadera conversación, y claro que lo primero que hice fue preguntarle cómo había conseguido mi número, pero no me lo quería decir, se limitaba a decir que alguien muy cercano a mí le había pasado mi número de teléfono, pero que no podía dar más detalles porque se lo había prometido a esa persona. Con que haya sido lucy la mataría (quién por cierto es mi mejor amiga hasta la fecha, por lo que también tendrá un rol importante en todo esto) ella siempre había querido que conociera a más personas, que saliera de mi zona de confort, básicamente lo que quería hacer era presentarme a varios chicos para ver si con alguno se daba algo, por eso no me extrañaría mucho que ella le hubiera dado mi número a este desconocido, aunque si ella lo conoce ya no sería tan desconocido. No sería tan descuidada de mandarme al primer tipo con el que se encontró en la calle. Se le había dado estos hábitos de querer presentarme a todos los que pudiera cuando se enteró que la persona con la que salía hace meses atrás era un chico, nunca fue algo de lo que hubieramos hablado, no es que se lo escondiera ni nada por el estilo, solo el tema no había salido en la conversación hasta tiempo después y cuándo terminé con él se puso manos a la obra para que me olvidara de todo lo más rápido posible. 

Le pregunté a aquel chico si la persona que le había pasado el número era Lucy a lo que respondió que no sabía quién era Lucy, y por la forma en la que lo había dicho no me quedaba duda que definitivamente ella no había sido, pero decidí escribirle a ella para despejar cualquier duda. Cuándo llegó a responder mis mensajes me decía que no había dado mi número a nadie y que jamás lo haría sin preguntarme antes, cosa que le creí.

Entonces estaba ante una situación en la cual no tenía ni la menor idea de la persona con la que estaba hablando y mucho menos de dónde me había encontrado, pero de todos modos seguí adelante con la conversación y le pregunté por su nombre, al menos eso sí tendría que decirme.

«Aris» fue lo que respondió a mi pregunta, ¿me estaba tomando el pelo? Se llamaba igual que mi amiga de la universidad, ahora tenía a dos Aris en mi vida. (como ya saben, estos no son los nombres reales, pero ambos tenían el mismo apodo aunque el nombre fuera algo diferente). Luego él quiso saber el mío así que me preguntó si el que le habían dado realmente era mi nombre o es que le estaban tomando el pelo. ¿Ahora vendría yo a tomarle el pelo? Jajaja.

Dejé que adivinará mi nombre por un rato o quizá solo le hice entrar en duda con el nombre que ya tenía. Pero al final le terminé diciendo que ese sí era mi nombre, pero que me dijera por el apodo que usaba desde que tenía memoria. Ustedes podrán conocer ese apodo como Ricky (aunque claro, no es el original, pero siempre podrían adivinarlo a partir de ahí). Así que ya pueden dejar de lado el nombre de usuario de Prince Eric y dirigirse a mí como Ricky.

Estuvimos hablando un par de horas a partir de ahí, me contó un poco de su vida y de lo que estaba haciendo en esa época, a lo que se estaba dedicando y todo eso. Tengo que resaltar que era menor que yo, esa época yo tenía 20 años (ahora tengo 22) y él tenía los 18 bien cumplidos (ahora debería estar por los 20). Me dejó en claro que venía de Alemania y que había llegado hace unos meses a nuestra ciudad (le pondremos el nombre de Kent a la ciudad, aunque claramente no somos de Inglaterra). También mencionó que no conocía a muchas personas acá y que por eso se había animado a escribirme la primera vez, aunque la mayor parte de su familia materna fuera de la ciudad de Kent.

Ese día hablamos hasta las 3 de la mañana, hace mucho que no lo hacía con alguien que no fuera mi mejor amiga Lucy, y la verdad se sintió bien poder hacerlo con alguien más, aunque no tuviera la certeza de si esa persona me dijera quien era realmente. Es el riesgo de internet, supongo.

Pero no fue hasta su último mensaje en el que me pedía que nos viéramos más tarde ese mismo día que un escalofríos recurrió todo mi cuerpo, tardé varios minutos en darle una respuesta y eso fue porque en ese instante le escribí a lucy contándole toda la situación y lo que pasaba, pero obviamente no me respondió porque estaba durmiendo como cualquier otra persona a las 3 de la mañana. Cómo no obtuve ninguna respuesta decidí ir a mi propio riesgo y le dije que sí. Pero sin antes pedirle que me pasará sus redes sociales, a lo que me sorprendió que me dijera que no tenía facebook, ¿Quién rayos a sus 18 años no manejaba facebook? Pues sí, Aris (versión chico) no lo tenía, al menos sí conseguí su cuenta de Instagram y su perfil en Tiktok.

Quedamos en vernos a las 6 de la tarde, a la salida de sus clases de inglés. (no lo mencioné pero, lo único que hacía aquel chico era pasar clases de inglés, no tenía ninguna actividad en esa entonces aparte de inglés).

Y así fue cómo había quedó en verme con un chico que había conocido un poco un par de horas antes a través de la pantalla de un celular. Sí que estaba demente para hacer algo así, ¿Ustedes lo hubieran hecho?

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