Un par de ojos miraban con diversión y preocupación al exorcista sonrojado, quien se negaba a destapar su boca con la mano.
Kou noto la mirada de sus amigos sobre él e intento ir a su asiento para evitar que preguntara que le pasaba, pero el castaño se interpuso en su camino con una gran sonrisa.
Los ojos de Yokoo se curvearon de diversión al notar que el rubio se negaba incluso a mirarle los ojos.
Algo había pasado y su instinto le rogaba que lo averiguara.
- Neh~ Kou. ¿Te paso algo? – Pregunto Yokoo con una sonrisa en el rostro y con la mano derecha le picaba juguetonamente uno de sus hombros.
- Yokoo – Lo llamo su novio en un modo decepcionado, el omega no necesitaba saber lo que pensaba para saber sus intenciones.
Satou miro intensamente al alfa, como advirtiéndole que parara sus juegos.
Algo que ignoro por el bien de su curiosidad.
- N-no me paso n-nada – Dijo Kou aun con la mano en su boca, amortiguando un poco su voz.
- ¡Oh! En serio, entonces no tendrás ningún problema con mostrarnos lo que te paso en el labio, ¿no? – Dijo el castaño acercándose aún más al rubio.
- T-tu como sabes que-- ¡Ah! – Exclamo el exorcista luego que, en un momento de distracción, el castaño tomara su muñeca y destapara sus labios, dejándolo expuesto al mundo.
Yokoo rápidamente se inclinó su rostro para ver mejor el labio y pronto sus ojos se abrieron como platos al notar el tamaño de la hinchazón.
Ese labio podía tener el mismo grueso que su dedo meñique.
- Oh, santo cielos –
Incluso Satou parecía tan sorprendido como él.
Los tres se quedaron ahí parados sin hacer nada, los dos estaban sorprendidos por el tamaño del labio y Kou se encontraba muy avergonzado por ser visto de esta manera.
De inmediato volvió a tapar la boca para que nadie más lo vea.
- ¿Qué te paso, Kou? – Pregunto Satou preocupado por su amigo. - ¿Te caíste de camino a la escuela? –
- ¿Es una alergia o alguna picadura de abeja? – Se unió a las preguntas Yokoo con un ceño de preocupación.
Sus preguntas solo hacían que el rostro del exorcista se volviese rosa al recordar la verdadera razón del porque su labio este inflamado.
Necesitaba una buena excusa para no ser descubierto.
Pero antes que pudiese decir algo, su plan se desmorono tan pronto como el semblante de Yokoo cambio a una más relajada y juguetona.
- Ahora que recuerdo, no dijiste que ibas a verte con tu novio antes de que comenzara la escuela – Pregunto Yokoo con una sonrisa pícara al recordar ese detalle.
El rostro de Kou estaba rojo, no, hirviendo de vergüenza por toda la sangre en su cabeza.
No esperaba que el castaño se acordara de eso, ya que solo lo menciono una vez ayer, cuando se acercó a preguntarle a Satou sobre que regalarle a Hanako para su tercer mes aniversario.
Y por supuesto, como una buena pareja, Yokoo estaba al lado del omega como para escuchar la conversación.
Pero solo se quedó callado y sonriendo mientras sacaba a escondidas una cajita de pockys de fresa de su mochila, para sorprender a Satou.
Fue su error no pensar que no juntaría su conversación con la razón de su labio inflamado.
- ¡Oh, dios mío! Su beso de despedida debió haber sido tan apasionado para que terminaras así –
- ¡Shun! – El sonido de su nombre lo alerto de que debía de dejar de burlarse ahora o se enfrentara al enojo de su novio.
Y cuando Satou se enoja, no es bonito.
El pelinegro dejo escapar un suspiro de resignación por su comportamiento, cuando se enfrentó a su amigo solo le dio una leve sonrisa de disculpa.
- Iré a la enfermería por un cubrebocas y en el camino te comprare una bebida fría para la hinchazón – Fue lo único que dijo antes de salir del salón, no sin antes de hacerle una seña al alfa.
Con la mitad asomada en el umbral de la puerta, el pelinegro con dos dedos señalo sus ojos y luego a los del castaño.
Después de aquella seña, Satou desapareció por los pasillos bajo la mirada atenta de su novio y amigo.
Hubo un momento de silencio entre los dos, hasta que Yokoo lo rompió con un suspiro.
Un suspiro que le recordaba mucho a los suyos, más específicamente, cuando pensaba en Hanako.
- Ahh~ como lo amo – Fue lo único que dijo el castaño antes de voltearse a mirar al exorcista que seguía con la mano sobre su boca. - ¿Sin resentimientos? –
- Sin resentimientos –
Estaba demasiado acostumbrado a la personalidad impulsiva de su amigo como para sentirse ofendido por sus comentarios.
Al menos no se ha metido en problemas por sus acciones volátiles en todo el tiempo que se conocían, aunque ahora que lo pensaba, si hubo una vez que tanto como él y Satou fueron encontrados inconscientes en la sección de preparatoria.
Pero no sabía si fue por su culpa o solo era una mera casualidad.
- ¿Aun no llega el maestro de historia? – Pregunto Kou en un intento de no pensar tanto en como a este paso su amigo quedaría viudo si el castaño no se controlaba.
- Oh, cierto no estabas. Tenemos hora libre hasta el siguiente modulo – Respondió Yokoo antes de hacer una seña para que observara todo el salón de clases. - ¿Por qué crees que no hay nadie más que nosotros aquí? –
Ahora que lo mencionaba, no había notado que estaba vacío cuando entro al salón, ya que se encontraba pensando en que hacer para bajar la hinchazón de su labio.
El otro debió haber notado su preocupación, ya que hablo para consolarlo.
- ¡No te preocupes Kou! Satou tiene experiencia en esto – Dijo Yokoo con una sonrisa mientras le daba unas palmaditas en su hombro.
Como dijo con anterioridad, su amigo nunca fue bueno para medir sus comentarios, por lo que cuando se dio cuenta de lo que dijo, ya era demasiado tarde para corregirse.
El exorcista sonrió por detrás de su mano y miro a su amigo que ya empezaba a sudar a balas al mismo tiempo que su tez se volvía en tonos azules.
Los dos se miraron de la misma manera que hace unos minutos atrás, pero con los roles invertidos, el castaño prefiriendo ser la burla de su amigo que enfrentar a su novio enojado, miro al rubio con ojos de pánico.
- No le digas que te dije – Le suplico en desesperación.
En ocasiones, el karma llega de manera instantánea.
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Curiosidad que exorciza#10
Los nombres de Yokoo y Satou fueron revelados en el spin-off Houkago Shounen hanako-kun capítulo 24 junto con el nombre de pila de Tsuchigomori.
También me base en el spin-off para darme ideas de las personalidades de estos dos, ya que en el manga son pocas las veces en que salen ambos.
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Una Segunda Oportunidad Para Nuestro Amor
RandomAmbos se aman, lo han demostrado en varias ocasiones y para él, su amor y afecto se ha vuelto un bálsamo para su corazón herido. Pero sabe que su relación no llegará lejos, no cuando uno de los dos ha estado muerto por más de cincuenta años, Hanako...