우리의 41: Nunca mas 노래

164 30 0
                                    

- No te alejes nunca más, por favor.- pidió el mayor.

Hyunjin se quedó helado con esa petición. Nunca se llegó a imaginar poder tener al castaño delante de él, diciéndole que era feliz con él, que quería estar a su lado.

Siempre pensó que Minho y sus amigos lo odiarían por lo que hizo, que si alguna vez volvían a verse en la vida, no le dirigirían la palabra. Porque se consideraba mala persona, se fue, sin tener en cuanta los sentimientos de personas ajenas.

Dejando que otra lágrima resbalara por su mejilla, respondió.- Te lo prometo..- murmuro, posando sus manos sobre las de Minho en su propio rostro.- Nunca más me alejaré de ti.

Minho ya no aguantaba más el repiqueteo de su corazón en el pecho, y acerco los rostros de ambos, dejando que sus respiraciones chocasen con impaciencia. Hyunjin termino finalmente de juntar sus labios, en su beso que se había hecho esperar por mucho tiempo.

El toque suave de sus bocas los hizo plenamente felices. Hyunjin había olvidado el sabor de los labios de Minho, algo por lo que se recriminó mucho tiempo, pero que al fin podía volver a sentir. Minho, por su parte, estaba más que feliz con aquello, siempre era Hyunjin el que empezaba los besos, y eso le gustaba.

Se separaron finalmente, sin cortar la distancia, y juntando sus frentes. Hyunjin nunca imagino poder volver a ver a Minho. Aquello le parecía un sueño, y no quería despertarse.

- Vi tu actuación en el auditorio.- murmuro Minho sobre sus labios, una pequeña sonrisa los adornaba.- Estuviste genial.

Hyunjin se sonrojó fuertemente.- ¿E-En serio?- pregunto, emocionado.- Yo toqué..

- Nuestra canción.- finalizo Minho, con mariposas en el vientre.- Creí que la olvidarías.- se sinceró.

- Eso nunca.- aseguro.- Lo siento, otra vez..

- Dije que dejaras de disculparte.- rio levemente Minho, acariciando el largo cabello contrario.- Siempre me gusto tu cabello largo.- halagó.

Hyunjin sonrió, sonrojado.- Gracias.- murmuro, pero una duda rondaba por su mente.- ¿Cómo me has encontrado? Seúl es muy grande.

- Te vi en el periódico.- confeso Minho.- Creía que era mi imaginación, pero.. ya veo que no.- no podía dejar de sonreír.

Hyunjin también sonrió, sintiendo que sus mejillas se cansarían de estar en la misma posición por tanto rato. Abrazo al mayor por los hombros, escondiendo su cabeza en el cuello contrario, pudiendo oler el varonil aroma de Minho, que seguía igual a cuando eran jóvenes.

Pero una ráfaga de viento interrumpió la escena, calando en los huesos de ambos. Habían olvidado que estaban en invierno, en medio de la calle, de noche. Se separaron, y Hyunjin agarro de la mano al castaño, guiándolo por las calles de la vacía ciudad.

- ¿Dónde vamos?- pregunto Minho, con curiosidad. Su hotel quedaba del otro lado.

- A mi departamento.- informo Hyunjin, con una sonrisa amable.

Minho no pudo evitar ponerse nervioso por eso, pero apretó más el agarre entre ambos, caminando en un cómodo silencio. Si alguien los veía, no le darían importancia. Ellos al fin eran felices después de muchas caídas, y no iban a renunciar a ello con facilidad.

Minho miraba con curiosidad por la zona en la que caminaban, totalmente fascinado con las luces de la ciudad de noche. Hyunjin lo veía a él, con una sonrisa.

- ¿Es la primera vez que vienes a Seúl?- pregunto Hyunjin, divisando su edificio a lo lejos.

Minho asintió.- Así es, es bastante linda, pero... Hyejoogu me gusta más.

- En eso estoy de acuerdo.- apunto Hyunjin, llamando la atención de Minho.- Por mucho tiempo añore el pueblo, aunque al principio lo odiara, termine agarrándole cariño.- confeso.

Minho sonrió, alegre de escuchar eso.

Finalmente, entraron a un edifico bastante alto, de color blanco marfil y con una muy linda, y cara decoración. Minho estaba realmente impresionado. Hyunjin abrió una puerta de las últimas plantas, dejando que el mayor entrara.

Recorrió el departamento de Hyunjin con la mirada. Este, era de paredes blancas y grises, con una decoración simple, pero había muchas cosas que llamaban la atención, empezando por la pila de papeles y partituras que habían por todas partes, también pudo distinguir un rincón lleno de cuadros apilados y un atril para cuadros en una esquina.

- ¿Te gusta pintar?- le pregunto al peli negro, colgando su abrigo en el perchero.

Hyunjin colgó la chaqueta de su traje, asintiendo.- Es una afición que cogí cuando pensaba demasiado las cosas.- admitió.

- ¿Pintabas cuando te acordabas de mí?

- Te pintaba a ti.- corrigió.



















우리의 - 노래

Our Song // HyunhoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora