Pandillas II

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La taza de té parecía danzar sobre las manos de Danzo en el histórico ochaya, al frente de él estaba sentado el mismísimo dueño de la Yacuzza, Sarutobi Hiruzen, a la derecha del viejo una geisha servia un té verde. La muchacha actuaba como si  sirviera  a su mismísimo abuelo. Danzo se preguntaba si aquella geisha era un familiar o solo ignorante de sus clientes.

-- Has pensado en tu situación Danzo---' preguntó el yacuzza dándole una pitada a su pipa. -- Creí que habías entendido todo la última vez que nos vimos. ¿No fui muy claro?..

Danzo dio un sorbo a su té y poso las taza en la mesa. La geisha se levanto y en un francés fluido invitaba a sentarse a los turistas recién llegados.

--¿Cómo cambian los tiempos?-- haciendo una seña con la cabeza hacia la geisha.

--No desperdicies tu última oportunidad. Busca una forma de arreglarlo Danzo, el tiempo se termina, y la paciencia también, ahora vete tengo otra reunión.--

Danzo obedeció al viejo yacuzza y haciendo una reverencia salio del ochaya.

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--¡A dónde vas tan guapo!!----dijo la alegre muchacha brincando a la cama de este.--¿A una cita acaso?-- Sari preguntaba con una mirada complice. Yahiko  miro a su media hermana y sonrió con dulzura.

-- No-- cambiando de gesto por uno más serio dijo-- escucha bien, Sari, tengo una reunión de trabajo muy importante, por eso necesito que tu... -- señalandola con el dedo-- permanezcas lo más lejos posible ¿Entiendes?

Sari apretó sus labios, su hermanastro estaba siguiendo los mismos pasos del padre, el primer marido de su madre. Se levantó resignada ---- Cuidate-- dijo y salio...

A las afuera del pasillo,
Tenten agarraba la barbilla de Kankuro -- ¡Qué lindo novio, no crees Temari!-- la rubia solo reía. El muchacho la abrazó y le dio un corto beso.

--¡Vamos Yahiko! -- grito Gaara, mientras encendía el Honda Civic rojo. Los tres hombres  iban de trajes mientras las mujeres vestían unos kimonos en una versión modernizada. Todos subieron al auto y partieron a destino.
Sari miraba con recelo como su hermano partía felíz con los otros cuatro, el odio se apoderaba de ella  de ella, se preguntaba desde cuando, esos, llevaban a su hermano por el mismo mal  camino que su padre, seguramente si su madre se enterara de todo sufriría mucho.

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----Mierda, mierda, mierda--- gritaba Danzo mientras golpeaba el manubrio de su Audi A4 negro en el estacionamiento del ochaya.---¿Qué quieres Ino?-- grito atendiendo el móvil.

La rubia de larga cabellera se alarmó por su tono de voz -- Nada, es que... llamaron del consorcio por un pago...

-- A si, si ya lo arreglo Ino ya...-- Danzo dejaba deslizar el móvil sobre su cuerpo, ¡Cómo no se había dado cuenta!  Eso seria la solución total rubias había un montón...

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Los ánimos de Hiashi estaban por el suelo aun así tenían que seguir trabajando, sabía que no debían mostrar debilidad, por eso acudió a la cita de trabajo con Iruka.
Naruto llegaba sonriendo al viejo edificio, hoy vería a la hermosa hija del arquitecto, había esperado con tantas ansias ese día, hasta traia rollos de canela para ella, pero toda ilusión cayó cuando apareció un joven de ojos perlados y cabello largo.

----Neyi ¡Buen día!-- dijo el rubio desepcionado, hacía poco que lo conocía y no le agradaba para nada contar con su presencia. El muchacho sólo asentó con la cabeza-- presumido-- dijo Naruto entre dientes, para encontrarse con Kiba.

-- Y bien que parece este lugar, una mierda-- hablaba Iruka viendo como Neyi se asomaba a su tío. Quien parecía no prestarle demasiada atención.----Veo.. que te afecto mucho Hiashi, te aclare como eran las cosas-- intentando consolar al hombre mientras se apoyaba sobre una vieja mesada ya casi destruida por los años de uso. --- No estan solos, cualquier cosa pide ayuda, siempre voy a estar.

----Si, y te lo agradezco Iruka----levanto la mirada -- Volviendo al trabajo que parece oficinas, se instalarian comercios, bares solo piensalo...

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Orochimaru subió a la parte trasera de su limisine junto con su acompañante Shijima.  Indicó el destino a su chofer y partieron.

--¿Qué sabemos de ellos?-- pregunto el hombre con tono sereno.

-- Son novatos pero bien organizados, aunque inocentes, sabemos donde viven y ahí tienen sus oficinas, error, tenemos localizada a un familiar, segundo error.--'

-- Bien, solo observa, los seguiremos estudiando, es hora que ese viejo ceda el mando y se retire.

La geisha servia el mismo té de la mañana cerca del medio día. Ese ochaya era el lugar preferido del viejo, se sentía mimado en ese lugar.

--¿Haces perder mi tiempo con novatos?--- comenzó aquella batalla Orochimaru--Creo que es hora de cambios.

--¡No somos novatos! Tenemos experiencia---respondio violentamente  Kankuro.

----Si... repartiendo en motoneta como yanki... -- largando una pequeña carcajada.

-- Basta, cálmense, están aca porque... tienes razón Orochimaru, quizás sea hora de un cambio. Pero por ahora quiero que se conozcan. Que empiezen a trabajar juntos ---- Una sonrisa se dibujo en la cara de Shijima aquel chico de pelo rojizo, ojos verdes y tatuaje en la frente le era bastante agradable a su vista.-- ¿Quisiera saber quiénes de ustedes pueden ocuparse de esta organización Akatsuki? Es vieja como yo y aunque nunca nos entrometimos en los asuntos. Hoy han planteado un problema en mi ciudad. Y piden ayuda. ¿Quién quiere aceptar el trabajo?

--Nosotros--salto Yahiko.

------Unos novatos haciendo el trabajo de grandes. A los Akatsuki los conozco como la palma de mi mano déjalo a nosotros ustedes aprendan algo más.---- Yahiko quiso contestar aquel insulto decirle que el también los conocia como la palma de la mano, pero Gaara  hizo  seña dándole a entender que era mejor así. Todavía no era tiempo de su entrada.

------Creo que Orochimaru tiene razón, para ustedes tengo algo un poco más grande...

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Danzo llego como un rayo a su oficina, revolvía cada cajón que encontraba buscaba la salvacion, sonrió, en su mano estaba lo que necesitaba "Póliza Seguro de vida".

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Naruto tiro los rollos de canela al frente de Kiba, que permanecía sentado con sus libros de veterinaria en su temporaria vivienda.

----Gracias, pero creo que no los compraste especialmente para mi-- decía Kiba mientras abría la bolsa para comerlos.

---Bhaa, si quieres tiralos.

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--No sigo perdiendo el tiempos con novatos Hiruzen, me largo, me mantendré en  contacto--- Orochimaru hizo una reverencia al viejo y salieron, Shijima imito la accion de su sensei. De seguro se verían otra vez.

------Bien --- dijo el viejo prendiendo su pipa--- les dare unos encargos y consejos... Algo bueno sacaré de ustedes--- los cinco jovenes yacuzza se sentían orgullosos.

YACUZZA NO SAMURAIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora