Todo el público estaba preparado para el espectáculo, adelante estaba el jurado que iba a calificar y escoger a los mejores actores de la obra.
Dylan estaba en el segundo piso con una gran vista hacía el escenario, preparado para ver a Azúl.
La señora Sonia, sus tíos y Alexa esperaban el momento para ver el sueño de Azúl cumplirse actuando en una de las mejores obras navideñas de la ciudad.
Las luces se apagaron todo el escenario del teatro quedó oscuro. De inmediato se volvieron a prender, Dylan pegó un brinco del asiento, era Azúl.
Estaba vestida con el traje de Santa Claus, botas negras, el gorro rojo, el traje era como un vestido hasta llegar a los muslos, manga larga, su cabello lo tenía suelto y bien alisado, su cara blanca resplandecía por todo el teatro.
—¡Es hermosa! — Murmullo Dylan observándola, sus ojos brillaban.
Estaba parada en la mitad del escenario con una gran sonrisa, una sonrisa inocente...
Todo el público murmuraba "Es hermosa" "tiene buen cuerpo" "es preciosa" "¿tendrá novio?" "seguro es la protagonista" "Quiero tener la piel como esa chica"
Dylan los escuchaba y sonreía al saber que era una chica espectacular.
—Todos están haciendo un gran alboroto por Azúl — Confesó Alexa mirando a los alrededores.
—Mi hija hará una gran actuación — Dijo la señora Sonia con mucho orgullo.
La obra de teatro era sobre la época de Navidad, ya que casi estaban cerca para esta fecha. Habían gran variedad de niños y sus padres, así que era una presentación familiar.
—¡Bien, Hagámoslo! — Se dijo a si misma mirando a todo el público que la observaba sorprendidos.
Bryan después de un rato, bajo hasta abajo del edificio por el elevador. Quería saber qué había sucedido con Renata.
—¿Dylan? ¿Renata?
Miraba por todos lados pero no los veía por ningún lado, fue a preguntarle al vigilante que estaba sentado observando las cámaras de vigilancia.
—Buenas... ¿Señor vistes a una chica que hace rato pasó por aquí?
—¿La chica que estaba llorando? Claro, se fue corriendo hacía ese lado — Dijo señalando la dirección.
Bryan estaba preocupado, significaba que Dylan no había llegado en el momento preciso de cuando sucedió todo.
—¿Estás seguro que se fue por esa dirección?
El vigilante asintió con la cabeza.
—Pero hacía ese lado no vive ella... ¿A donde fuistes Renata? tengo que llamar a Dylan — Cogió su teléfono para marcarle.
—¡Feliz navidad! — Gritó Azúl con el micrófono que tenía en su mejilla, todos los niños comenzaron a gritar de felicidad.
Por la parte de atrás se abrió un gran telón, árboles de navidad, luces, regalos de diferentes tamaños, era la decoración perfecta para esta presentación.
Los elfos navideños comenzaron a salir por todos lados, era como un músical, cantaban y hablaban entre ellos. La villana era una bruja que odiaba ver a todos los niños del mundo felices por despertar y ver sus regalos debajo del árbol de navidad.
Azúl se tenía que enfrentar contra la bruja, los elfos eran los personajes secundarios y cantaban al fondo.
Era una escena espectacular, Azúl haciendo gestos graciosos con el rostro, caminaba de forma graciosa, su forma de cambiar la voz a la hora de hablar. Los niños y sus padres reían y se divertían. Dylan seguía asombrado boquiabierto con el gran talento que tenía Azúl y apenas se estaba dando cuenta de todo.
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Por ti, un café todos los días
Ficção AdolescenteDylan es un chico universitario un poco tímido, amable y siempre está sonriendo, lleva varios años enamorado de una chica llamada Azúl, que trabaja en una cafetería con el nombre de Magic-coffee. Pero nunca se ha atrevido a hablarle o confesarle los...