Un unicornio llamaba por mí, caminaba hacia él, vi como desapareció entre el frondoso bosque, pero no es un bosque simple es uno de ¡Algodón de azúcar!. Corrí a tomar rápidamente un cachito del algodón. Dios, que rico.
Realmente estaba disfrutando del buen sabor dulce en mi paladar, el de color azul era mi favorito, dejaba mi boca de ese color. Es divertido
— Te amo algodón de azúcar — dije en voz alta, así alcanzando un pedazo más grande para introducirlo en mi boca cuando...
Mhm...Agh...A-ah...
Jadeos, gemidos y quejidos sonaban por todo el lugar ¿De dónde provienen? Me preguntaba.
Volteé a todos lados para averiguar, no logré ver nada, pero al parecer venían de una luz muy, muy brillante. Me dejé llevar por los sonidos y automáticamente caminé hacia la luz, cada vez me era más difícil de ver. La luz lastimaba la vista.Los sonidos se volvían cada vez más y más notorios y fuertes ¿quién hará eso? La extraña luz se volvió más fuerte y...
Desperté.
Al parecer todo fue un sueño, y uno muy delicioso.
Los rayos del sol entrando por la ventana caían en mi rostro adormilado, me talle los ojos dándome cuenta que los sonidos sí eran reales y no parte del sueño. Con lentitud y, flojera daba vuelta en mi cómoda cama encontrándome con nada más y nada menos que con mi rubio y divertido novio. Denki.
Al oír otro de sus quejidos, con todas las fuerzas que tenía en ese momento, me reincorpore para verlo con atención.
Estaba sudando, no hacía tanta calor como para sudar así. Tome su temperatura con la palma de mi mano y ¡Oh, dios! Está ardiente.
No de esa forma, pervertidos.
Sus gemidos y quejidos subían de tono, ¿estará enfermo? ¿El ramen extra picante que comimos ayer le habrá hecho daño?
Preocupada por su salud le quité la sábana que nos cubría, al hacerlo soltó un ligero quejido. Debe de sufrir mucho. Puse mi mano en su mejilla, él seguía dormido, pero por reflejo se recargo en ella. Lo miré con inquietud, intentando ver que es lo que le pasaba.
Lo miré de arriba a bajo, mi mirada cayó en su bóxer negro notando una muy notable erección.
Oh, es eso. Bueno a los hombres les pasa esto ¿no? Una erección involuntaria.
Roce la palma de mi mano con su erección para verificar si estaba excitado. Y así es, estaba tan excitado que se retorcía gimiendo mi nombre.
Pequeño pervertido.
Definitivamente el no está soñando algo con Pikachu o algo parecido. Me pregunto que es lo que hace... o lo que le hago yo.
Me volví a costar intentando volver a dormir.
Cinco.
Diez.
Quince hasta veinte minutos.
Y no deja de gemir. Soy alguien muy curiosa y quiero saber lo que mi yo de los sueños le hace.
— Cariño... denki...— le decía mientras movía su cuerpo para poder despertarlo.
— Denki, despierta — alce la voz moviendolo más.
— ¡Denki! — grite en su oído.— ¡Más! — se despertó. Su respiración estaba aceleraba, gotas de sudor resbalan por su desnudo torso.
— Carajo... solo fue un sueño — dijo mientras se echaba el cabello hacía atrás quitándose las pequeñas gotas de sudor de su frente.
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Boku No Lujuria Academia (+18)
أدب الهواةEscenarios ficticios con los personajes de BNHA. Contiene escenas sexuales muy específicas, leer bajo su responsabilidad, Contenido: ● Boys love ● Girls love ● Hentai Se puede hacer pedidos o hacer sugerencias, estoy abierta a sus mentes de lujur...