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Jisung llego de la escuela algo agotado, se tiro en su sillón boca abajo. Su celular vibro muchas veces, sabiendo de quien se trataba.
―Hola Jisunggie, ¿cómo te fue? ―se acerco Ryujin con una sonrisa.
El castaño murmuro algo con su rostro hundido en los cojines.
―Aigo~ nuestro niño esta muy cansado ―Seungkwan se aproximo y quito la guitarra que colgaba en su espalda
―Para recuperar fuerzas deberias comer ¿qué dices? Kwannie y yo preparamos algo muy rico para ti ―la rubia acaricio el cabello del menor quien la miro.
―Oye, ―murmuro Seungkwan hincándose, viendo los orbes de Jisung. Ambos del mismo color avellana.― los usaste ―acaricio la parte inferior de los ojos.
―Sí
―¿Sucedio algo malo hoy en la escuela? ―cuestiono la rubia acariciando su cabello
―No... Supongo que fue a causa de que los use el resto del día y nadie se dio cuenta
―Ya veo ―asintio―, ¿por qué no nos cuentas mientras comemos algo?
―De acuerdo ―asintio levantandose del sillón. Al estar de pie abrazo a Ryujin y Seungkwan los cuales sonrieron.
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Durante la comida Jisung les hablo de Hikaru, Seungkwan y Ryujin se pusieron muy contentos de que el castaño tuviese una nueva amiga, su primera amiga en realidad. Al terminar subio a su habitación y su celular sono en señal de una llamada entrante.
Jisung sonrió y contesto de inmediato.
―Hola
―Hola, ¿Cómo se encuentra el futuro de la buena música?
Jisung rio.― Tío Jackson
―Hola Sunggie ―sonrio al otro lado de la linea.
―Estoy bien, ¿tú? ¿Cómo va la disquera?
―Trato de manejarlo, aun no logro comprender como Mark podia con tanto
