Horacio es un dulce Omega el cual logra descontrolar la vida de Viktor Volkov, un cruel alfa al cual toda su vida no le ha interesado nadie a parte de él mismo.
Se había subido incompleto el capítulo, lo siento 😩🥺
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Pasó una semana desde que Horacio decidió renunciar a ese horrible trabajo, lamentablemente no había podido encontrar algo más; no ha estado tan desesperado por conseguir trabajo en esta semana ya que sabe que sus ahorros le alcanzan para vivir bien durante un par de meses así que ha estado descansando estos días tratando de superar lo que vivió en aquella fiesta.
Aún no logra olvidar la sensación de tener a aquellos hombres tocandolos y lo impotente que se sintió en ese momento, todos estos pensamientos han estado provocando en Horacio varios ataques de ansiedad desestabilizando sus feromonas por lo que últimamente no se ha sentido para nada bien físicamente.
-Deberias ir a un médico cariño, si sigues así sin hacer nada solo va a empeorar - le dijo Valentina por medio de una llamada teléfonica.
-No es tan grave Val, solo necesito unos días más para olvidarlo y verás como vuelvo a sentirme bien. - trato de sonar calmado y seguro de sus palabras pero él sabía bien que lo que le ocurre si es grave.
-Pero no es algo que simplemente olvidas y ya, te paso algo bastante fuerte y te está afectando mucho, debes pensar en tu salud H, has tenido más de seis ataques de ansiedad en la semana.
-Val estoy demasiado cansado y no quiero hablar de esto en serio, no me va a pasar nada, hablamos después.
Y sin dejar que su amiga diga una palabra más Horacio colgó la llamada y soltó un suspiro de frustración, claro que él sabe que seis ataques de ansiedad en tan poco tiempo no es algo normal y que se pueda tomar con calma pero tampoco está preparado para tener que contarle lo que sufrió a alguien más, además, toda esta semana ha estado preocupado por la desestabilización de sus feromonas temiendo que en cualquier momento se hará presente su celo.
Horacio decidió irse a la cama un poco antes de lo habitual ya que se encontraba bastante mareado y agotado para seguir despierto; en esta semana no ha estado durmiendo bien ya que no se siente seguro ni en su propio cuarto y al vivir solo teme que en cualquier momento alguien pudiera entrar a su apartamento sin problema, por esto sus noches se han tornado bastante largas en las que solo logra cerrar los ojos por pequeños lapsos de tiempo; pero esta noche es diferente, hoy por fin ha logrado caer en un sueño profundo y tranquilo sin el tormento de alguna pesadilla.
Al rededor de las 7 de la mañana se despertó gracias al ruido de un golpeteo, se desperezo y al estar más despierto logro identificar que aquel ruido proviene de la puerta de su apartamento, al parecer alguien lo necesita urgentemente ya que el golpeteo se vuelve cada vez más rápido y desesperado; lentamente se levantó de su cama y se vistió con una camisa larga y ancha ya que acostumbra a dormir unicamente en boxer, se puso sus pantuflas de conejito y se dirigió a la puerta, abrió un poco la puerta sonando su cabeza y observó al hombre frente a él, se sorprendió mucho al tener una mirada profunda e intimidante frente a él, mirada que pensó no volvería a ver pero allí está aquel frío ruso parado en la puerta de su apartamento vistiendo un elegante traje de color azul oscuro con una camisa blanca y una corbata del mismo azul. Sin esperar invitación el ruso abrió la puerta por completo y paso al hogar quedando parado en medio de la sala bajo la confundida mirada de Horacio.
-Necesito hablar contigo - la voz del ruso logró sacarlo de sus pensamientos haciendolo fruncir el seño por las palabras escuchadas.
-Crei que había quedado claro que no quería volver a tener algo que ver con usted ni con su empresa señor Volkov - soltó Horacio haciendo relucir un poco de ira en su tono de voz.
-A ver Horacio, tú sabes que siendo un Omega no vas a encontrar un trabajo como el que yo te dí en ningún lado, si no vuelves a mi empresa todo lo que estudiaste será en vano, además, el manejo de la empresa no ha sido el mismo sin ti, te quiero a mi lado para seguir llevando la empresa tan bien como lo hemos hecho en todo el tiempo que tú has estado allí, eres incluso más competente que muchos alfas que han intentado obtener el puesto. - sus últimas palabras confundieron un poco a Horacio, ¿acaso lo estaba alagando en una forma tan extraña? ¿Cómo se le ocurría venir a pedir que vuelva después de todo lo que pasó la última vez?
Un silencio incómodo reino en el lugar, Horacio estaba demasiado impresionado por el hecho de que el mismísimo Viktor Volkov este ahora frente a él pidiéndole que regrese a trabajar, confundido por notar en la mirada de Viktor un poco de desesperación como si em verdad la presencia del moreno fuera de vital importancia en la empresa y por último se sentía bastante enojado con el hombre allí parado pues no entiende como puede ser tan sinvergüenza de venir a buscarlo después de haberlo humillado de una horrible manera la última vez que se vieron.
-No voy ni a pensar en volver a esa empresa cuando ni siquiera he recibido una disculpa por la forma tan humillante e inhumana en la que se me trató, además de que para estar en las mismas condiciones en las que me tenían prefiero terminar trabajando como mesero en algún restaurante del centro. - un fuerte olor a fresas podridas inundó la habitación marcando aún más el enojo de Horacio.
-Bien, lamento mucho que hayas tenido que pasar por eso esa noche y si vuelves podemos hacer algunos cambios pero en serio te necesito en la empresa - esas palabras dejaron sorprendido hasta al ruso ya que pues si era cierto que Horacio es muy bueno en su trabajo, sonrisa embargo, aún así el ruso pudo haber conseguido a alguien más para el cargo pero algo dentro de él le impide dejar ir a Horacio, algo dentro de él siente la necesidad de mantener a Horacio junto a él.
Horacio medito un poco la palabras del ruso volviendo a dejarlos a ambos en un silencio de algunos minutos nos evitando el contacto directo de sus miradas.
-Si vuelvo a trabajar allí, voy a dejar de hacerme cargo de terminar con sus parejas pasajeras, no voy a volver a asistir a ningún evento a menos que sea para cerrar un negocio - pensó por unos segundos - y quiero un aumento en mi salario - dicho esto conecto su mirada con la del ruso mostrándose seguro de sus palabras.
Un par de minutos después bastaron para que Viktor sediera a las peticiones de Horacio acordando que el moreno reanudará sus actividades laborales a partir del día siguiente; la atmósfera se calmó un poco luego de unos momentos aunque aún así Horacio seguía sintiendo un fuerte olor a vodka pero se vio incapaz de reconocer el sentimiento que acompaña aquel olor.
Viktor por otro lado estaba un poco distraído prestando excesiva atención a las piernas descubiertas de Horacio lo que le estaba empezando a generar un leve calor en su interior; sus fosas nasales persivieron como el olor a fresas ahora era dulce ya que Horacio por fin se encuentra más calmado.
De un momento a otro Viktor acorta la distancia entre ambos quedando bastante cerca del rostro de Horacio, a esa distancia Horacio logra ver pequeños destellos violetas en los ojos del ruso entendiendo así que el celo del alfa está cerca.
-Creo que debe irse ahora señor Volkov, no puedo lidiar con usted si es que llega a su celo en este momento.
Viktor no contestó, simplemente se acercó más a Horacio juntando sus bocas en un beso profundo para después irse sin decir una palabra y sin cambiar su expresión fría dejando a Horacio más confundido de lo que estaba.
"Fue simplemente un impulso por su celo y las feromonas que habían liberadas en el ambiente" pensó el moreno mientras volvía a la cama.
