Todas las mañanas hacia el mismo recorrido; me levantaba, desayunaba, me vestía y salía en busca del metro que me llevaba al instituto.
( Es lo que tiene vivir en una ciudad tan grande como Londres. )
Todas las mañanas, menos esa. -Mala suerte para ti, Mónica Mendoza, hoy no verás a tu amor platónico- dije metafóricamente en alto.Llevo viéndolo 7 años de mi vida seguidos, no he faltado un solo día a la parada, todo para poder ver esos ojos verdes como la hierbabuena, ese color pelinegro como el regaliz que tanto brilla y como siempre, nunca cruzar una sola palabra, solo miradas desde lo lejos, desde el otro anden.
Si, ni si quiera lo conocía. Y ESTABA PERDIDAMENTE ENAMORADA DE EL DESDE HACIA 7 AÑOS!!! 7 años en los que le vi crecer, pude adivinar cual era su sudadera favorita o saber cual era su bebida favorita de Starbucks.
Miles de veces pensé en ir a hablarle aunque eso supusiese perder mi metro, pero al menos ganaría puntos en esta partida de ajedrez que ni si quiera empezó, por que yo solo soy una mas, una mas de todas esas personas que pasa por su lado cada mañana, y estoy segura de que siendo así de guapo me extrañaría que estuviese soltero.
ESTÁS LEYENDO
Andenes
RomanceLlevan 7 años de su vida coincidiendo en el mismo sitio cada mañana, hasta un dia. Que hizo cambiar el rumbo de las cosas, nunca habian cruzado una sola palabra, sabian de su mutua existencia, pero no se conocian, habian cruzado alguna que otra mira...