➢CHAPTER SEVEN

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La fiesta había sido todo un éxito para la cumpleañera y Venus se sentía orgullosa de sí misma por ello, pero, el tiempo volvió a correr rápido y ya muy pronto estaban a 30 de octubre, el día que llegarían los estudiantes de los otros colegios que...

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La fiesta había sido todo un éxito para la cumpleañera y Venus se sentía orgullosa de sí misma por ello, pero, el tiempo volvió a correr rápido y ya muy pronto estaban a 30 de octubre, el día que llegarían los estudiantes de los otros colegios que participarían en el Torneo, cuando estuvieron todos ubicados donde debían y Dumbledore iba a dar su discurso el Comedor parecía más chico de lo usual, aunque como mucho habían cincuenta estudiantes más de lo normal, Venus se mantenía junto a Lyra de un lado y a Theo del otro con sus brazos entrelazados como una pequeña costumbre entre ellos, el pelinegro le quedaba más bajo a la mayor ya que aún no la alcanzaba, pero eso no era impedimento alguno para tal cómoda pose al momento de enganchar sus brazos.

Junto a Theo estaba el pequeño grupo de amigos del pelinegro con el que Venus no era cercana pero tampoco tenía una relación de odio, había lo que se podría decir, una bonita convivencia de paz entre ellos.

El profesor Dumbledore se levantó de su asiento y carraspeó.

—Buenas noches, damas, caballeros, fantasmas y, muy especial bienvenida a nuestros invitados. —les regaló una sonrisa a los estudiantes extranjeros. —Deseo que su estancia sea agradable. —hizo una pequeña pausa para continuar. —El Torneo estará oficialmente abierto al final del banquete, ahora ¡a disfrutar de la comida!

—Que inspirador —comentó el pelinegro amigo de la morena haciéndola reír para luego ambos separar sus brazos al momento en que las fuentes de comida se llenaron a rebosar de comida como de costumbre, pero no solo lo habitual, sino que también había platos característicos de los países de cada escuela participante, hasta había algún que otro plato francés que Venus conocía gracias a su familia y demás.

Venus observó el comedor repleto, hasta que su mirada se posó en alguien que le parecía familiar.

—No recordaba que las hermanas Delacour también tuvieran un hermano.

Lyra levanto la mirada hacia donde miraba su amiga—. Ese es su primo, Thomas Delacour y está en Ravenclaw.

—Tom Delacour. —Lo pensó un momento—. Espera, ¿ese no es el chico que siempre te coquetea? —destacó Venus divertida.

—Agh ni lo menciones. Es como un chicle, siempre quiere estar sobre mí, y no en el buen sentido. Además, quiere que vayamos juntos a Hogsmade pero no sé cómo decirle que ya iré con Cedric. —La Black posó su cabeza entre sus manos, fastidiada.

—Simple. —Lyra miró a su amiga—. Dile que estás saliendo con Diggory y que ambos se meten la lengua hasta la garganta. —Al finalizar, Venus soltó una carcajada al ver a Canuta estupefacta, a lo que recibió un zape como respuesta de la mayor.

—¡Oye no me pegues! —se quejó la morena menor sobándose la cabeza-

—Pues madura, Cedric y yo no hacemos esas cosas, ni estamos saliendo, quítate esas ideas de la cabeza, somos amigos —dijo Lyra en tono serio, sin embargo, la sonrisa consejos y ejemplos niña, no te quitará un pedazo, mira, yo lo hago y estoy enterita.

—Tú haces cosas peores Rosier, basta déjame comer —bufó Lyra para ponerse a comer mientras su amiga reía por lo bajo.

—Eres demasiado gráfica Rosier, basta —se quejó Theo a su lado haciéndola soltar una carcajada algo fuerte que oyeron unos cuantos, pero mas no dieron importancia.

Pansy, que no se hallaba muy lejos levantó la mirada de su plato de comida dirigiéndola hacia la morena que habitaba en sus pensamientos la mayor parte del día, y al verla reír de una forma tan pura y bonita se le calentó el corazón y no solo eso, sino que sus mejillas adoptaron un ligero tono rosa. Ella quería ser capaz de verla reír así siempre, ser la culpable de esas sonrisas o carcajadas, quería verla feliz siempre porque eso la hacía feliz a ella, pero no estaba preparada para admitir que Venus Rosier la había cautivado con su belleza interna y externa de tal forma que en sus planes a futuro siempre una morena esbelta aparecía junto a ella.

[...]

El dichoso torneo de los Tres Magos ya estaba abierto para los aspirantes de entrar en él, Venus no le daba mucha importancia a ello, pero de todas formas estaba bien atenta a ello gracias a su espíritu chismoso.

Sabía que un par de chicos de su casa habían metido su nombre en el Cáliz de Fuego y que ansiaban ser elegidos para obtener la gloria eterna, aunque no solo eso, si llegaban a ganar la casa de Salazar Slytherin sería siempre recordada por los méritos de dicho ganador.

Sin embargo, haciendo un poco a un lado el tema del Torneo, Venus se sentía muy agraciada con los nuevos alumnos de las otras escuelas, pudo apreciar la delicada belleza de las chicas de Beauxbatons principalmente. Había intercambiado bastante con ellas compartiendo y enseñándoles un poco más sobre su adorado Hogwarts.

Se había hecho amiga —si es que así se le podía decir—, de una bonita chica rubia de ojos grises, su nombre era Yvonne, al momento de hablar por primera vez se vio claramente el "click" instantáneo al tener tantas cosas en común, cosa que las hizo congeniar muy bien.

Por otro lado, el profesor Snape ya tenía la lista de alumnos a los que debía darle clases particulares luego de que les haya puesto una pequeña prueba.

La lista era breve y pequeña, pero sabía que no se iba a aburrir. En la lista se encontraban, Ernie Macmillan, Pansy Parkinson y Neville Longbottom. Eran pocos y solamente una persona era de su casa por lo que la convivencia se podría complicar, más sabiendo que el tal chico Macmillan era todo un prejuicioso con los Slyterin, cosa que le importaba poco, pero sí sabía que al chico posiblemente no le vaya a gustar que una Slytherin justamente le enseñase.

En cuanto Pansy y Neville sabía que la iba a llevar bastante bien, ya que, con Neville había intercambiado palabras un par de veces y sabía que el chico asustadizo posiblemente no le iba a dar problemas, y con Pansy ya estaba todo más que hablado, la pelinegra —que por alguna razón que no entendía estaba nerviosa siempre—, le caía bien, así que no habría problemas.

Es más, Theo se había extrañado cuando Venus le contó que Pansy sería una de sus alumnas, ya que, bien sabía él que Pansy era brillante, así que saber que iba a necesitar apoyo de más en pociones le extrañó, mas no dijo nada en voz alta, ya que analizar todo le parecía mejor y también se le daba mejor si éramos sinceros.

[...]

31 de octubre de 1994

Finalmente había llegado la hora de que el Cáliz de Fuego largase los nombres de los participantes del Torneo, Lyra y Venus habían arrastrado a Juls a su mesa para que las tres estuvieran juntas a la hora de la selección y así chismear a gusto.

—Esto está interesante —murmuró Venus hacia sus amigas por lo bajo.

—Sí, se siente la tensión en el aire —concordó Juls con aire dramático.

—Veinte galeones a que sale sorteado alguien de Slytherin —soltó Lyra sonriendo de lado, de inmediato Juls se giró hacia ella golpeando a Venus con su cabello en el proceso.

—Cuarenta galeones a que es uno de Gryffindor —dijo la menor con decisión. Venus soltó una pequeña risa negando con la cabeza.

—Ustedes gastan más dinero en apuestas absurdas que en ropa o libros —se burló la Rosier, pero, sin embargo, agregó—. Pero veinte galeones a que también es Slytherin.

Juls sopló el aire contenido con burla—. A mi bolsillo caerán cuarenta relucientes galeones que usaré en pegatinas para mi escoba, ya verán.

Lyra rió—. Ya verás como no. 

~[⛓️r-agus]

Déjate amar ||Pansy Parkinson||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora