|Luna Llena|

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Yeonjun:

Quemé todas las cartas, simplemente ya no puedo. 

Las tomé de mi mochila y las rompí en pedazos y luego hice una fogata con ellas. Dae las leyó todas. No lo había visto llorar así desde que tenía 5. Voy a quemar esta cuando termine, solo necesito una despedida, no sé por qué, pero lo necesito.

Te vimos. Estamos detrás de ti, ni Daesung ni yo hablamos de ello, simplemente estamos detrás de ti.

Estabas hincado a su lado, tienes una marca muy descuidada, parecía que acababa de sangrar y la piel alrededor estaba morada e inflamada. Daesung se paralizó, mirándote, pero al mismo tiempo viendo otra cosa, otro tiempo y otro momento. Toda su infancia asustado de esos omegas, pensando que tú nunca serías así y, ahora, te ve arrodillado y con los ojos perdidos.

No quiero dejar que se acerque a Huening Kai. Daesung intentará arrancarle la garganta a la primera oportunidad, pero nunca se ha enfrentado a alguien como él, y si Dae termina lastimado, no sé lo que voy a hacer.

Kai nos vio. Me reconoció a mí, pero creo que se sorprendió al ver a Dae. Escapamos, sin embargo seguimos su rastro y estamos detrás de ustedes. Ninguno de los dos sabe qué vamos a hacer, si te seguiremos hasta que no podamos movernos o hasta que los pulmones de alguno de nosotros finalmente colapsen ante el el aire; si intentaremos rescatarte o hablar contigo. No sabemos.

Sé por qué Kai miró con tanta extrañeza a Daesung. Me lo dijiste, pero no sé si a mí me corresponde decírselo. Tengo miedo de que, si hablo, se sentirá más alejado de ti, de que decida que es tiempo de sacarte de tu lugar especial. A como yo lo veo, es algo para quererte mucho más, pero Dae y yo no vemos las cosas de la misma manera.

Tuve que parar de escribir, respirar y pensar qué estoy haciendo.

No estoy seguro de si te escribo a ti, a mí o a Dae. No encuentro el valor para que sea mi voz la que explique por qué Daesung es tan alto como Kai, por qué si nuestro chico fuera cruel, sus ojos serían exactamente iguales a los de Huening.

Recuerdo que durante mucho tiempo me ocultaste la verdad, que me contaste a mí y al resto del mundo la mentira mejor elaborada de todas; también recuerdo lo avergonzado que estabas cuando me lo confesaste, dos días antes de que te perdiéramos.

Daesung es tu hijo en toda la extensión de la palabra, pero no salió de ti, su carne nunca fue tuya.

Te reencontraste con Kai mucho después de su última discusión, había un omega muy joven y moribundo que sostenía con dolor a un cachorro recién nacido. Me dijiste que te pidió que le dieras un nombre, porque él no podía. Un nombre y una familia, una galaxia nueva lejos del peligro. Escapaste con el recién nombrado Choi Daesung, huyendo del alfa cruel que se había olvidado del cachorro que nunca quiso y que buscaba en cambio al omega vivo que lo rechazó.

Dae me ha visto a los ojos y me ha dicho lo que quiere. Mañana cumple 16 años y quiere a su papá de vuelta.

A Choi Yeonjun, quien quiso al cachorro como si fuera suyo. Choi Yeonjun, ahora más que papel quemado y recuerdos a medio enterrar. Choi Yeonjun, siempre el sol de nuestra galaxia, sol que no nos van a quitar. 

Chaos [Soojun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora