Carla y Samuel: vecinos, amigos y amantes

Romeo y Julieta

Carla estaba en su habitación junto a Polo. Se estaban besando pero Carla se sentía desconectada de esa actividad. No lo disfrutaba ni le desagradaba. Era para ella más una actividad coreografiada y mecánica. Lo sentía como un protocolo.

Esos besos eran una forma de tener a Polo entretenido. En os últimos días se lo veía demasiado interesado en el tema de tener relaciones sexuales. Ella podría hacerlo pero la idea no le entusiasmaba. Sentía que si lo hiciera sería igual que los besos con Polo, sería todo mecánico y hasta aburrido. Ella sabía que Polo jamás la presionaría pero tampoco se sentía bien por darle esperanzas de hacer algo que no estaba segura de querer hacer. No por miedo, sino por falta de entusiasmo.

Mientras Polo le daba en el cuello observó una fotografía enmarcada que tenía colgada en la pared. En ella se veía a un grupo de estudiantes de las Encinas con disfraces sobre un escenario. En el medio del grupo se encontraban Samuel y Carla.

Durante el tercer año de Samuel y Carla en Las Encinas, los muchachos tuvieron en clase de literatura que trabajar la famosa tragedia de "Romeo y Julieta" de William Shakespeare. Los estudiantes de Las Encinas no eran muy dados a la literatura en general salvo estudiantes como Lu o la recién ingresada Nadia que eran buenos alumnos en todas las clases. Era normal dado que la mayoría de ellos se imaginaban en el futuro manejando las empresas de sus padres o algo así. Pero quien era particularmente bueno en literatura era Samuel García Domínguez. A Carla esto no le sorprendía dado que conocía a Samuel mejor que nadie y sabía que la pasión del castaño era leer y escribir. Era un lector voraz y leía a un nivel muy superior al de un chico normal de 14 años. Además, Samuel era también escritor. A su corta edad tenía escritos una gran cantidad de cuentos que él le permitía leer a muy pocas personas y Carla era una de las afortunadas. Ella no entendía porque era tan reservado con eso porque sus cuentos eran realmente buenos. Samuel era de utilizar un lenguaje conciso y minimalista pero era imaginativo y siempre se le ocurrían cosas muy interesantes. El cuento preferido de Carla era uno en que una bailarina de ballet le pedía a su amante que se la comiera después de hacer el amor. Porque sí, Samuel podía tener una imaginación muy retorcida y divertida a veces a pesar de ser tan tímido. De hecho, Samuel ganó un concurso literario para estudiantes de Las Encinas con ese cuento. Aunque lo presentó de modo anónimo y a todos les encantó, cuando a Carla se le escapó por error que Samuel era el autor todos lo felicitaron. Incluso los más escépticos como Lu y Polo tuvieron que admitir que Samuel tenía talento. Actualmente Samuel trabajaba en su primera novela pero ahora sí que no se lo dejaba leer a nadie, ni siquiera a Carla, lo que tenía a la marquesa muy curiosa. Muchas veces Samuel quería desechar los cuentos que escribía pero Carla, Ignacio y Pilar siempre lo convencían de no hacerlo. Carla creía que todos esos cuentos podrían ser publicados en el futuro.

Ese año, la profesora en vez de darles un examen final a los estudiantes de tercer y cuarto año les dijo que deberían representar la obra para todo el colegio. Esto no les gustó a la mayoría pero algunos lo veían mejor que tener que estudiar para un examen. A Carla le daba igual pero había chicas como Lu y Marina a las que la idea las entusiasmaba y, claro está, querían interpretar a Julieta. Carla supuso que los varones no estarían tan entusiasmados por actuar y acertó casi por completo. Y fue casi por completo porque hubo uno que quería actuar: Samuel. Carla no podía entender como alguien tan tímido querría actuar en público. Samuel era generalmente muy sarcástico e ingenioso, pero solo con las personas que conocía. Cuando Carla se lo preguntó la respuesta del muchacho fue muy clara:

-Quiero aprender a escribir mejores personajes-dijo el castaño-y creo que si participo de la construcción de un personaje para interpretarlo eso podría ayudarme.

Por supuesto que Samuel intentaría interpretar a Romeo. Eso alertó a Carla porque si Samuel obtenía el papel eso significaría que besaría a la chica que interprete a Julieta y Marina y Lu habían expresado su deseo de interpretarla. Sobre todo a Carla la perturbaba que sucediera con Marina.