Por una poción de amor✔

Capítulo 8: Tentación

Como si el pasado hubiera vuelto a sus vidas Mew y Gulf siguieron la rutina que hacían de niños cada vez que visitaban al abuelo, ir al templo a rezar, comer, bañarse en el rio, conversar y mirar las estrellas mientras bebían jugo que ahora era remplazado por una lata de cerveza fría y por ultimo dormir en la misma cama.

Gulf se encontraba demasiado nervioso para dormir a sí que le robó un somnífero natural a su tío para calmar un poco su inquietud, se acomodó mirando hacia la pared, si se recostaba mirando el rostro de su amado no sabía de qué iba a ser capaz.

A los minutos después llego a la habitación Mew, cuando entró encontró todo a oscuras y al joven profundamente dormido, Gulf entre sueños solo pudo sentir que la cama a su lado se hundía y volvió al reino de Morfeo, Mew suspiro y se acercó a la espalda del menor, uno de sus dedos viajo lentamente de arriba hacia abajo por la columna de este.

— ¿Cuándo se volvió tan ancha tu espalda? ¿En qué momento creciste tanto que te volviste más alto que yo? — susurró más para sí mismo.

— ¿Por qué eres tan cruel conmigo destino? ¿Por qué lo pones tan cerca de mí si no me dejas tenerlo? — murmuro contra su cabello mientras olía el suave aroma del shampoo mesclado con su olor natural, algo nervioso acorto la distancia entre ambos y coloco uno de sus brazos por la cintura de su amado girasol.

Ambos se mantuvieron en esa posición casi toda la noche pero cuando Gulf estaba despertando sintió un agradable calor y olor frente a él, al cual se aferró aún más mientras sonreía, sin notar que provenía del cuerpo de Mew.

Mientras buscaba la fuente de ese agradable olor su rostro quedo posicionado en la curvatura del cuello del mayor, guiado por sus más bajos instintos lamio la zona, llenando su boca de un exquisito sabor mesclado con lo salado de su sudor, Gulf deseaba más de ese manjar pero al abrir los ojos por completo y volver en si se dio cuenta que abrasaba y lamia al hombre que le robaba el sueño, hombre que se encontraba durmiendo solo en bóxer; Gulf con suavidad y completamente sonrojado se alejó sin apartar su mirada del cuerpo semidesnudo de su amor platónico.

En su mente quería tocar, lamer más, besar cada parte de él y husmear bajo ese ajustado bóxer negro que no dejaba mucho a la imaginación.

Tragando con fuerza comenzó a alejarse de su tentación, se odio por haber elegido el lado de la pared; para salir debía pasar sobre Mew ya que esa era su única vía de escape, con cuidado comenzó a moverse quedando a horcajadas sobre su cuerpo dormido, inconscientemente sus manos quedaron sobre su pecho desnudo haciéndolo tragar con fuerza mientras su respiración se volvía errática.

Su imaginación lo llevo a un mundo de fantasía en donde Mew agarraba fuertemente sus caderas y se hundía profundamente dentro de él mientras lo besaba con fiereza y jadeaba su nombre una y otra vez.

Se sintió como un pervertido cuando se dio cuenta que sus fantasías estaban haciendo estragos en su cuerpo y haciendo que este sobre reaccionara y comenzara un leve vaivén con sus caderas sobre la pelvis de su dormido amigo, sintiendo un leve jadeo de la boca de Mew entro en pánico y corrió a la ducha en donde alivio su ardiente cuerpo.

Unos minutos después Mew despertó al sentir que se encontraba solo en la cama, dándose cuenta que su cuerpo despertó antes que él, avergonzado abraso la almohada sintiendo un agradable olor, sin darse cuenta su mano ya se encontraba dentro de su bóxer aliviando su deseo mientras olía el agradable olor que emanaba de la almohada de Gulf.

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Off se encontraba terminando el desayuno cuando el abuelo de Gulf se acercó al joven.

— ¿Qué tal estuvo la noche? ¿Lo sedujiste? ¿Cuándo nacerán mis bisnietos? —

— ¡Abuelo! —

— Papá, primero debe terminar la universidad después se puede embarazar —

— ¡Tienes razón hijo!—

— ¿De qué demonios hablan ustedes? ¡Soy hombre! ¡No me puedo embarazar! —

— ¡Ja! ¡Me debes 1000! te dije que era el de abajo — dijo en murmullo el abuelo.

— Ustedes apostaron a mi costa par de viejos pecadores — cuando Mew entro los tres quedaron en silencio.

— ¿Interrumpo algo? —

— Para nada, solo estábamos hablando de que Off hoy no va al templo — después de un agradable desayuno ambos jóvenes fueron a la universidad con normalidad aunque el hecho de que Mew fue con la misma ropa que el día anterior no pasó desapercibido para nadie, menos para su hermana y Zee, aunque ninguno de los dos quiso preguntar al verlos llegar juntos y sonriendo.

Las semanas iban pasando; las sonrisas y miradas furtivas entre Mew y Gulf eran cada vez más frecuentes al igual que sus salidas a comer y largas llamadas telefónicas, muchos de los que los conocían se daban cuenta ya que al fin su relación estaba volviendo a ser lo que hace mucho fue.

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Imagen de referenciapara la cama que compartieron (por eso la única vía de escape de Gulf era pasarpor sobre el durmiente cuerpo de Mew)